Diego Canga dice sentirse «preparado» para acabar con la hegemonía del PSOE en Asturias

El alto funcionario europeo se siente capacitado, dice, por la experiencia que acumula como mano derecha del hoy vicepresidente de Italia, Antonio Tajani, al que ayer se refería como «su maestro». Canga reconoce en este sentido haber aprendido mucho «después de más de una década» como jefe de gabinete de Tajani, durante su etapa como comisario de Industria y Presidente del Parlamento Europeo, con el que asegura haber estado «en los lugares más difíciles».

Desde su despacho en Bruselas, agradece todas las muestras de apoyo recibidas durante los últimos días, a raíz de que EL COMERCIO hiciera público su nombre como candidato del PP, así como la «ilusión que transmiten» aquellas personas que se están poniendo en contacto con él.

El PP asturiano iniciará hoy mismo el proceso para oficializar su candidatura con la convocatoria del comité ejecutivo autonómico, órgano compuesto por cerca de un centenar de dirigentes orgánicos y representantes institucionales del PP, al que le corresponde proponer al candidato y elevar su nombre al comité electoral nacional, que deberá ratificarlo. Se trata de una mera formalidad puesto que, en la práctica, la elección del candidato del PP a la Presidencia del Principado, así como los cabezas de cartel a las alcaldías de Oviedo y Gijón, la asume la dirección nacional del partido. El PP asturiano echa a andar así su maquinaria electoral en torno a la figura de Diego Canga, si bien hace tiempo que el partido ya trabaja en la elaboración del programa electoral, tarea encomendada a la comisión de estudios.

La dirección autonómica, con Álvaro Queipo al frente como secretario general tras la dimisión de Teresa Mallada, será la encargada de crear la plataforma electoral que dé cobertura al nuevo candidato, así como de la constitución de un comité de campaña del que formarán parte tanto Diego Canga y su equipo de colaboradores, como una representación de la dirección autonómica. El objetivo pasa por garantizar la máxima coordinación entre ambas partes y que queden claramente delimitadas las responsabilidades de cada una, para evitar que se repitan las tensiones vividas hace cuatro años entre la entonces presidenta del PP, Mercedes Fernández, y la candidata, Teresa Mallada.

Génova no es, en general, partidaria de la bicefalia, precisamente para evitar este tipo de desencuentros, pero en esta ocasión entiende que es lo más acertado. Se busca así que el candidato, independiente, pueda centrar todo su tiempo y esfuerzo en la campaña electoral mientras, de forma paralela, la labor orgánica recae sobre la figura de Queipo. Al secretario general le corresponderá la tarea de designar a los candidatos locales, a excepción de Oviedo y Gijón. Un proceso que se había iniciado durante la etapa de Teresa Mallada como presidenta, antes de que trascendiera públicamente que no representaría al partido en las próximas elecciones, pero que se vio paralizado en los últimos meses. La voluntad del partido es apoyar a sus ocho alcaldes para que se presenten a la reelección, aunque se da por hecho que habrá cambios en buena parte del resto de las cabezas de lista, con la esperanza de mejorar los resultados de las últimas elecciones.