Coronavirus en Asturias | Cien personas se hacen la PCR por el brote de Ribadesella

El brote de Ribadesella que ya desencadenó siete contagios por coronavirus, dos más en las últimas horas, obligó ayer a extremar las medidas de prevención. Entre ellas, se instaló un puesto autoCOVID en el polígono de Guadamía y se amplió el radio para efectuar el estudio de contactos. Así, los clientes que hayan estado en La Taberna El Escribanu y en el camping de Sebreño entre el 1 y el 15 de agosto deberán solicitar una prueba PCR a través del formulario de Astursalud o llamar al 984100051 y limitar su vida social y cumplir las medidas de seguridad hasta que contacten con ellos.

Así lo hicieron el propietario del camping, Miguel López, y su mujer cuando se enteraron de que su hija dio positivo. «Mi mujer, el resto de la plantilla -seis ya dieron negativo- y yo estamos esperando al resultado de las pruebas». Explicó que «un usuario dio positivo en coronavirus y ya está en Galicia desde el viernes y nuestra hija, quien además realiza sustituciones eventuales, llevaba desde el lunes en aislamiento domiciliario». «Creemos que se contagiaron en una reunión de amigos, fuera del camping», agregó.

López explicó que el sábado se puso muy nerviosa la gente del camping ante el llamamiento del Principado. «A nosotros desde Salud no nos habían dicho nada», lamentó.

Mientras, Otea, la patronal hostelera, criticó que ante esta situación «hay poco trato humano y empresarial, todo el mundo se pone nervioso». «Se tiene que tratar de otra manera», consideró.

En el polígono riosellano de Guadamía, además, se ponía ayer por la tarde en marcha el autoCOVID, con algo más de un centenar de personas citadas. Unos de los primeros en acudir, junto a sus dos hijas pequeñas, fueron los madrileños Eduardo e Isabel, con segunda residencia en Ribadesella. «Estuve un par de días jugando al pádel en el camping, así que, por seguridad y aunque no nos encontramos mal, decidimos hacernos todos la prueba», explicó el padre. Desde Ribadesella llegaron también Eva y Miguel, para quienes «no fue ninguna sorpresa» que se declarase un brote en el concejo. «Está viniendo mucha gente y no todo el mundo está respetando las normas, por eso no nos parece justo que se tache a la juventud asturiana de irresponsable cuando la mayoría están teniendo cuidado y son en gran parte turistas a quienes se ve de fiesta por las calles», afearon.

Para Mikel y su familia la de ayer iba a ser su última jornada en Asturias antes de regresar al País Vasco, pero «deberemos retrasar un par de días la vuelta a la espera de los resultados porque un amigo nuestro estuvo en el camping de Sebreño».