Coronavirus en Asturias | Educación iniciará el curso escolar con parte de los alumnos en casa si se agrava la pandemia

Según el Ministerio de Sanidad en ese junio se detectaron en Asturias diez casos nuevos de coronavirus, en julio 81 y en lo que va de agosto 364. Desde Educación recuerdan que su plan de contingencia constaba ya de tres escenarios, donde el primero era esa vuelta completa a las aulas, el segundo admite que parte de los alumnos se formen desde casa con el ordenador, y el tercero sería el confinamiento, con todos los escolares en modo online: «Nosotros seguimos con la idea de empezar enteramente presencial, es decir, el escenario 1. Si en los días que resta la situación epidemiológica se agrava, y de forma coordinada Educación y Salud creen que es más adecuado empezar en el escenario 2, la presencia al centro se limita, es decir, habría alternancia entre ir a clase unos días y otros online».

Las autoridades educativas y sanitarias siguen así la evolución de la pandemia para terminar de decantarse. Quedan 22 días antes de que comiencen las clases en Infantil, Primaria y Educación Especial (con fecha de inicio el 10 de septiembre), 26 días para que lo hagan Secundaria y Bachillerato (14 de septiembre) y 30 para Formación Profesional, Idiomas y adultos (18 de septiembre).

La idea del ala sanitaria del Gobierno la avanzó este domingo en EL COMERCIO el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño: «Creemos que a mediados de agosto habrá un descenso de visitantes y bajará la densidad de la población». Descontado el periodo de incubación del virus, «será iniciado septiembre cuando tengamos una foto fija de la situación epidemiológica y podremos hacer previsiones para el otoño». Bajo esa premisa, Cofiño dijo que al plan de contingencia hecho en julio por Educación habrá que hacerle una actualización «a finales de agosto». La vuelta a las aulas sigue como objetivo «aunque haya que hacerlo con más medidas de seguridad».

La evolución en lo que queda de agosto determinará si Educación puede ir a una vuelta a las aulas como la que describía en su protocolo de julio. Entonces hablaba de un escenario 1 en el que «la pandemia permite» la enseñanza presencial, pero con las cautelas propias de la nueva normalidad: limitando los profesores que rotan por las aulas, ampliando la limpieza y desinfección y apartando a cada caso sospechoso para dar parte a Salud.

El escenario 2, el que ahora empieza a barruntarse si persiste el aumento de los casos, «obliga a los centros a una organización flexible», en la que se intenta que el alumno más vulnerable siga acudiendo al centro. El protocolo marca que «se priorizará en todo caso la asistencia en los niveles y etapas inferiores (hasta los 14 años)», se intentaría que las clases online coincidan en horario con las presenciales y cabe no usar el comedor.

Con incertidumbres y sin colmar las aspiraciones de los sindicatos, el Principado es de las pocas regiones que se han puesto como meta las clases presenciales y organizan la contratación de profesores de refuerzo para rebajar parte de la ratio por aula. La comunidad educativa reclama más esfuerzos, certeza sobre lo que les espera al volver al aula y cómo se reaccionará cuando haya contagios.

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, indicó que prevenir los contagios en las aulas «requiere inversión». La propuesta hecha desde el ministerio de Sanidad era que los niños estén en grupos de no más de «15 o 20» tanto en el aula como en el comedor y el patio. «Si no se hace, los riesgos de infección serán los mismos que en marzo», anotó.