La polarización centra la Conferencia de Presidentes

Pero en este ocasión, no parece que vaya a ser así. O al menos se presupone, tras escuchar en las últimas horas a presidentes populares, que quieren trasladar a esta conferencia el 'noismo' en el que se ha instalado el PP de Alberto Núñez Feijóo desde hace tiempo. Dos botones como muestra: las presidentas de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y la de Cantabria, que es anfitriona de la reunión, ya avanzaron ayer que hoy pedirán la derogación de la ley de vivienda. Y si en en este asunto no parece fácil encontrar puntos de encuentros, no digamos nada en el asunto de la financiación autonómica, donde podríamos estar hablando de ciencia ficción. Esa suerte de concierto catalán para atender a esa financiación singular para la comunidad que preside el socialista Salvador Illa divide más que acerca. Incluso dentro del PSOE, como ya ha dejado claro el presidente de Castilla La Mancha-Emiliano García-Page.

El asturiano Adrián Barbón ha optado por un perfil menos 'agresivo' que el de su compañero manchego. Aún así, ya ha dejado claro por activa y por pasiva que no aceptará un modelo de financiación basado en acuerdos unilaterales, sino en la multilateralidad, y que suponga romper el principio de solidaridad y equidad territorial. Algo que pondría en riesgo un modelo de financiación específico para Cataluña, que pasaría por la cesión de la recaudación de todos los impuestos a esa comunidad.

Y con estas cartas ha arrancado la Conferencia de Presidentes. Cada comunidad jugará las suyas, pero conscientes de que el entendimiento será complicado. Aún así, el presidente del Principado, Adrián Barbón, no pierde la esperanza. Antes de comenzar la reunión, el jefe del Ejecutivo asturiano afirmó que acudía a Santander con «afán de política de diálogo constructiva y la búsqueda de acuerdos».

Barbón defenderá durante su intervención en el plenario -cada presidente tiene diez minutos para exponer sus posiciones- su defensa de la ley de vivienda impulsada desde el Gobierno y, por ello, su aplicación en la región. Recordará el aumento de las partidas en los presupuestos autonómicos del próximo año en esta materia (143 millones de euros) para la construcción de 400 nuevas viviendas, que se suman a las 600 iniciadas en desde que comenzó la legislatura, así como la ampliación de las deducciones fiscales para facilitar el acceso a la vivienda. También explicará el programa Alquilámoste, que se pondrá en marcha para poner en el mercado de alquiler viviendas privadas vacías a precios asequibles y ejerciendo el Principado como avalista, es decir, asegurando el cobro del alquiler por parte del arrendador.

Respecto a la financiación autonómica, el presidente del Principado defenderá ante el resto de comunidades el acuerdo suscrito en 2020 por todos los partidos con representación en la Junta General, salvo Vox. Barbón reconocer que todas las comunidades están infrafinanciadas y por ello pedirá más recursos y que el nuevo modelo garantice la equidad en la prestación de servicios públicos «con independencia del lugar de residencia». Todo ello, eso sí, dejando claro dos cosas: por un lado que el nuevo modelo debe ser aprobado de forma multilateral, no en negociaciones unilaterales con cada comunidad, y que la Conferencia de Presidentes no es el lugar donde debe negociarse el nuevo sistema, sino en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. «Aquí cada uno hablará de su libro y listo, aquí no se va a acordar nada porque no es el lugar para ello», recalcó el presidente del Principado.

Respecto a los otros dos asuntos que se tratarán en la reunión de hoy en Santander, gestión migratoria y sanidad, Barbón reafirmará el compromiso de Asturias de mantener la colaboración con los programas de acogida «en la medida de nuestras posibilidades». En el segundo asunto defenderá un refuerzo de la coordinación nacional para aplicar criterios homogéneos para la captación de profesionales de otros países y potenciar la especialidad de medicina de familia. Cree que el presidente del Principado que de esta forma se contribuirá a solucionar la escasez de profesionales sanitarios que sufre España, especialmente en las zonas rurales y de difícil cobertura.

No está en el orden del día de la reunión de hoy, pese a que Asturias lo propuso, el problema de siniestralidad laboral. Aún así, Adrián Barbón aprovechará su intervención para proponer un pacto de Estado en este sentido, similar al plan de choque que ya está en marcha en la región y que fuer acordado con los sindicatos y patronal y en el que participan también la Inspección de Trabajo y el Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales.

Son asuntos los que hoy se abordarán en la Conferencia de Presidentes de gran calado. Por ello, Barbón pidió a los presidentes de las comunidades gobernadas por el PP que no utilicen el encuentro como «foco de distracción» y que no conviertan este foro en un «pim, pam, pum».