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R. AGUDÍN.
Viernes, 9 de febrero 2018, 04:24
Los alumnos que estudian en las aulas orientadas al norte del instituto Río de Trubia se «congelan» mientras el profesor da clase. Las ventanas son antiguas, de aluminio y el aire entra por todas las partes. «En estas aulas hay mucha humedad y ... de forma contigua está el monte», explica el jefe de estudios del centro, José Antonio Sieres. La calefacción en este centro se enciende a las 6.30 horas pero cuando llegan los alumnos, el aula sigue helada. «Los dos radiadores que hay son insuficientes para una clase tan grande y estamos con los abrigos puestos y con bufanda durante las clases», añade Laura Luz Fernández. Asimismo, Nel González apunta que algunos profesores van vestidos con varias capas de ropa. «Vienen con camiseta térmica, una camisa encima, el jersey, la trenca y la bufanda», añade este alumno de primero de Bachillerato.
Ante esta situación, la dirección del centro reclama a la Consejería de Educación dinero para cambiar las ventanas y que así los alumnos no pasen frío mientras están en clase. «Ya hemos conseguido renovar la cristalera de una parte del instituto, ahora nos falta financiación para la otra», dice en el centro.
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