Toledo despide a Carlos, el joven fallecido en el Boombastic, «una persona comprometida con la investigación y la docencia»

Todo es dolor y consternación para la familia y los amigos de Carlos Majano López, el joven madrileño de 25 años que falleció el sábado de madrugada al golpearse la cabeza cuando se encontraba en una noria en movimiento, en el festival Boombastic de Llanera.

De las primeras investigaciones, la Guardia Civil ya pudo confirmar «que lo ocurrido se trató de un accidente», aunque nada puede aliviar el dolor que embarga a sus seres queridos, quienes ayer, le dieron el último adiós a Carlos en una misa funeral a las seis de la tarde, en Tembleque (Toledo), localidad natal de sus padres.

Su padre, Juan Antonio Majano, roto de dolor, fue incapaz de articular una sola palabra a la salida del funeral. «No puedo, lo siento. Muchas gracias», comentó.

La tragedia para esta familia llegó sin avisar. Carlos había marchado desde Madrid con unos amigos al festival Boombastic de Llanera para disfrutar de sus vacaciones y pasarlo bien, sin imaginarse que sería en Asturias donde se esfumarían sus sueños y perdería la vida. A las cuatro y media de la mañana del sábado, los testigos indican que Carlos sacó la cabeza por los barrotes de la noria (que permanece cerrada y vallada), mientras ésta se encontraba en movimiento, y recibió un golpe tan fuerte, que fue letal. Aunque intentaron reanimarle por más de 15 minutos, nada se pudo hacer por salvarle la vida.

Carlos Majano López era un joven apasionado, que amaba lo que hacía y presumía de ello en sus redes sociales. Se había graduado en Ciencias del Deporte por la Universidad Europea en el año 2020 y también había cursado un máster del profesorado y de investigación en la Universidad de Castilla-La Mancha. A través de su currículo, él mismo se definía como «una persona comprometida con la investigación y la docencia». Además, estaba realizando un doctorado cuya tesis se enfocaba en el uso de la termología aplicada al estudio de lesiones en el fútbol, que lamentablemente no pudo concluir.

Un asunto en el que coincidieron tras el suceso tanto los usuarios del festival como la propia delegada del Gobierno, Adriana Lastra, es en destacar las medidas de seguridad del Boombastic. Ello no evitó un fatal desenlace ante el cual los organizadores reiteraron ayer su consternación.

«Lamentablemente, el accidente sufrido por uno de nuestros participantes ha hecho que esta edición de Boombastic sea diferente, pues el éxito de la convocatoria no minimiza la tristeza por una pérdida que toda la organización siente profundamente», explicaron a través de un comunicado, y agregaron que «queremos agradecer la actuación de las autoridades en unos momentos tan difíciles».

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