Arroes, un punto negro de la seguridad vial

Quienes la transitan a diario, saben que no es segura. La carretera nacional 632 a su paso por Villaviciosa es un arma de doble filo para los conductores y acumula en su historial decenas de accidentes de diversa consideración. Sus curvas, la alternancia de zonas de sol y sombra y el paso de más de 2.000 vehículos al día son algunos de los factores que influyen en la siniestralidad de la que está considerada la tercera vía más peligrosa del país.

Sin ir más lejos, recientemente registró dos accidentes con menos de una semana de diferencia. El jueves 22 de mayo, Óscar Bueno se dirigía a su puesto de trabajo cuando a la altura de Arroes perdió el control de su turismo y se salió de la calzada. Terminó suspendido sobre la valla quitamiedos con un desnivel bajo las ruedas y aunque logró salir por su propio pie del turismo y resultó ileso, sus vecinos aún no salen de su asombro. «Está claro que volvió a nacer, es un milagro que no le haya pasado nada», comentan. El motorista gijonés Humberto Bárcena no tuvo tanta suerte. Falleció el sábado 17 del mes pasado por la tarde, cuando también se salió de la vía en el kilómetro 55,500, a tan solo unos metros de donde cinco días después lo hizo Óscar.

Para los vecinos de la zona, los accidentes no son novedosos y no esconden su preocupación. La mayor parte de los siniestros los sufren usuarios habituales de la carretera, aquellos que la utilizan para desplazarse a sus trabajos, al centro de salud o para hacer recados. La N-632 da servicio a toda La Marina, una de las zonas más pobladas del concejo y comunica las parroquias de Quintes, Quintueles, San Miguel de Arroes, Arroes, Castiello de la Marina, San Justo, Careñes, Villaverde, Peón y Candanal con Gijón y Villaviciosa. El tramo entre Venta las Ranas y el enlace del Piles está catalogado como punto negro y considerado el tercero más peligroso de toda España.

Por ello los colectivos vecinales reclaman al Ministerio de Fomento más actuaciones en la zona. «Tendrían que echar asfalto nuevo por lo menos hasta la gasolinera de Venta las Ranas. Si se redujeron los accidentes cuando lo cambiaron en Puente Arroes, lo lógico sería que lo extendieran a todo el tramo», sugiere Ángel Fernández, presidente de la asociación San Juan Bautista, de Castiello de la Marina.

El artista Gallinota, residente en la zona, sabe lo que es pelear con la administración. Él fue quien el pasado otoño encabezó la iniciativa vecinal que logró reducir la siniestralidad de la N-632 en el kilómetro 57, donde casi a diario se producían accidentes. Tras mucho insistir, consiguió que la Demarcación de Carreteras interviniera para renovar el asfalto y reforzar la seguridad. «La zona del kilómetro 55 es ahora la más conflictiva», apunta.

«Máxima siniestralidad»

La preocupación se extiende también a Quintes y Quintueles, cuyos vecinos tienen que desplazarse a Venta las Ranas para acudir al centro de salud. «Es una vía de máxima siniestralidad y desconocemos si hay algún plan por parte del ministerio para seguir arreglando la carretera», expone Dioni Novel, presidente de La Parpayuela, el colectivo vecinal de Quintes. «El firme y la señalización no son malos, pero está claro que si hay tantos accidentes es que algo pasa», reconoce. Novel demanda más vigilancia y la elaboración de un estudio de los tramos más problemáticos. «A lo mejor con reducir los límites de velocidad, aunque sea al mínimo, se soluciona la siniestralidad», añade.

La mejora de la N-632 interesa también a los políticos. Tanto PSOE como Foro reclaman desde 2012 una actuación integral en toda la vía. El Pleno del Ayuntamiento de Villaviciosa aprobó el pasado año una moción presentada por los socialistas para instar al Ministerio de Fomento a actuar con urgencia en toda la vía, pero más allá de la actuación en 2,5 kilómetros de firme, aún no se ha hecho nada.