Un belén de premio en Villaviciosa

La afición de Nicolás Rodríguez por los belenes surgió cuando era un niño. Ya desde muy pequeño, se entretenía montando el nacimiento a modo de juego y junto a su familia solía visitar las muestras monumentales de Carda, Lastres o Villaviciosa. «Veía que en ellos amanecía y anochecía y yo quería conseguirlo también, tenía mucha curiosidad y era un afán de superación personal», asegura.

Y poco a poco lo fue consiguiendo. Con ocho años, a su casa de la calle Zaldívar comenzaron a acudir vecinos para visitar el belén y unos años después, la casa de sus abuelos en Amandi, se convirtió en un escenario de peregrinación por Navidad que, a finales de los 90, llegó a su punto álgido. «Llegué a tener ocho autocares un mismo día, era una locura», reconoce. Decidió parar unos años, hasta que la Fundación José Cardín Fernández le ofreció su sala polivalente, donde puede visitarse desde 2008 el conocido como 'belén de La Oliva'.

A medida que Nicolás crecía también lo hacía su muestra y aquel niño que jugaba con el nacimiento es en la actualidad uno de los belenistas mas conocidos y prestigiosos. No en vano, el viernes recogió el Premio Asturias de Belenismo como reconocimiento a su trayectoria y a la defensa de las tradiciones relacionadas con la Navidad. «Estoy muy contento porque es una forma de que reconozcan todos los años que llevo trabajando; aunque soy joven, llevo mucho rodaje y el premio me hace mucha ilusión», apunta.

Este año el belén consta de 50 metros cuadrados, más de 150 figuras y numerosas escenas donde no falta ningún detalle, como el gato que persigue al ratón o un nido en un árbol. Además, está dedicado a la memoria del belenista poleso Juan Manuel Rodríguez, 'Juanín', fallecido recientemente.

«Estos dos años anteriores no lo monté porque quise dedicarme a la familia, así que tuve que empezar de cero. Pero a pesar del trabajo y del cambio de materiales, disfruté muchísimo; ya estoy pensando en el del año que viene», confiesa con una sonrisa.

Y la pasión que pone en el belén se traslada al público. Casi 2.000 personas han pasado ya por la muestra. Un ejemplo son los gijoneses María José y Juan Manuel, quienes destacaron tras su visita «lo bien estructurado y distribuido que está; todo el trabajo que lleva es de admirar». Para quienes aún no lo hayan disfrutado, el belén podrá visitarse hasta el día 4, en horario de 12 a 14 y de 18 a 20 horas.