El Foro Jovellanos recibe a Carantoña hijo

La Casa Natal de Jovellanos se llenó hasta la bandera. La ocasión lo merecía. Francisco Carantoña Álvarez, hijo de Francisco Carantoña Dubert, fundador y presidente del Foro Jovellanos hasta su muerte, se unía a la institución cultural. La familia Carantoña en pleno respaldó a Francisco en un acto que él mismo calificó como especialmente emotivo. Claro que antes, mucho antes, ya había dicho lo propio Jesús Menéndez Peláez, presidente actual del Foro, y el académico de la RAE Salvador Gutiérrez Ordóñez, encargado de presentar al profesor de la Universidad de León que ayer recibió la medalla que le acredita como nuevo patrono del Foro Jovellanos.

Comenzó el acto pasadas las siete y media de la tarde con las palabras de la concejala Carmen Alsina, que acudió en representación del Ayuntamiento. Tras ella, la voz la puso Gutiérrez Ordóñez: «Vuestra elección ha sido justa, acertada y útil», dijo sobre el nombramiento, antes de hablar largo y tendido sobre el currículo vital y sobre todo profesional de un hombre nacido en Gijón 1957 y que creció entre la tinta de EL COMERCIO. Incluso adivinó la presencia de Francisco Carantoña Dubert mirando desde alguna esquina de la sala «cómo uno de sus hijos ingresa en este foro». Acudiendo al refranero concluyó: «De casta le viene al galgo».

Comenzó entonces un viaje por la vida de aquel «joven delgado y moreno» que estudió Historia y se convirtió con el paso de tiempo en un profesor «apreciado por sus alumnos en la calidad de sus clases» y en un investigador «reconocido por el rigor de su trabajo», un hombre entregado a la Universidad que nunca deja de llevar a Gijón «en sus retinas». Ni ha dejado tampoco de cargar periódicos bajo el brazo.

Ese hombre recibió después de escuchar estas palabras su medalla de patrono y antes de constatar lo que entonces ya era obvio: que su honor era doble, como hijo de su padre y de la ciudad, y como amante de la Historia y en particular de la Ilustración. Recordó el papel de Carantoña Dubert para crear y hacer crecer ese Foro y lo hizo antes de pronunciar la conferencia de ingreso en la entidad. El papel de Jovellanos en las Cortes de Cádiz era el motivo de su charla. Y en ese punto quiso dejar claro que el influjo del prócer gijonés fue tan importante que sin él puede que la Pepa no hubiera visto la luz. «Tuvo un papel decisivo no solo para que las Cortes pudieran convocarse», afirmó. Rememoró su designación como representante de Asturias en la Junta Central que convocó esas Cortes y su defensa de las mismas como forma de legitimar a los patriotas. Buscaba Jovellanos acercarse al modelo británico.