Immersive Oasis: soluciones software para experiencias con realidad virtual y aumentada

«Immersive Oasis (IO) fue constituida en septiembre de 2020, aunque la idea venía macerándose desde el invierno anterior. Fue todo un poco casual. Conocí a mi socio Iván (lleva más de 13 años como responsable de IT dirigiendo equipos y desarrollando proyectos para grandes multinacionales del sector industrial, así como actividades de formación) en una reunión para temas formativos y coincidió que llevaba unas gafas de VR. Quiso probarlas y ver lo que estaba haciendo con ellas y él solo empezó a verle cientos de aplicaciones en los campos donde él tenía experiencia: industria y formación.

A los pocos meses montamos un pequeño prototipo y, sin decir que era una cosa hecha por nosotros, se la ensañamos a formadores de distintos sectores y obtuvimos la misma reacción. Toda persona que lo probaba veía e imaginaba cómo aplicar la tecnología sin necesidad de que nosotros hablásemos.

Tras esa acogida, valoramos las distintas opciones y optamos por hablar la idea con el dueño del grupo empresarial para el que trabajaba Iván, en post de buscar sinergias con una empresa tractora desde el minuto uno. Y bueno, aquí estamos… Finalmente la idea gustó y se nos unió al equipo como business angel y como consultor estratégico».

«Nació con un enfoque hacia el mercado industrial y la formación. En parte por la facilidad de acceso a esos mercados mediante nuestros socios comerciales. No obstante, tras los primeros meses y, tras varios contactos con gente de peso en el sector tecnológico y formativo, tanto a nivel nacional como internacional. Vimos como nuestras soluciones y planteamientos podían ayudar a personas en otros sectores.

A día de hoy, estamos abriendo el camino a proyectos en el sector sanitario y, nuevamente gracias a casualidades de la vida, en el sector turístico. Un sector para el que estamos preparando acciones específicas y únicas en el panorama internacional, de la mano de grandes tecnológicas productoras de dispositivos AR y VR. Y que como no podría ser de otra manera, centrará su primer contenido internacional en nuestra región».

«Nuestro primer año ha estado dedicado a I+D, gracias al proyecto EBT. Esto nos ha permitido completar los desarrollos requeridos, investigar distintos tipos tecnologías para acometer los proyectos e incluso metodologías de trabajo. Algo que no habríamos podido hacer de la misma manera sin dicha ayuda EBT. Además, durante el año, hemos realizado contactos y acercamientos con distintas empresas y entidades tanto para colaboraciones como para venta de producto.

Ahora, en 2022. Nos enfocamos en cerrar algunos de estos proyectos, entre los que se incluyen colaboraciones con grandes empresas del sector tecnológico, hacer crecer al equipo y, comenzar a rentabilizar los desarrollos llevados acabo en el proyecto. Así como ampliar las líneas de negocio, especialmente en el sector turístico, donde tenemos ya varios clientes y proyectos muy interesantes«.

«Nos presentamos a la categoría EBT. Por lo que el proyecto que presentamos fue el mismo que para la ayuda. Es un conjunto de herramientas que utilizan AR, VR, tecnología móvil y, por supuesto, la nube y la analítica de datos para mejorar la eficiencia y la seguridad en la formación. Podríamos decir, ahora que está de moda el concepto 'Metaverso'. Que nuestro enfoque en el uso y la interconexión de estas herramientas es crear un 'Metaverso' formativo. Con una serie de funcionalidades que ayudarán a las personas a mejorar en su día a día y, esperamos, a encontrar el trabajo que necesitan para estar a gusto. Todo ello bajo tres premisas: usabilidad, escalabilidad y sostenibilidad«.

«Asturias tiene cosas que son una verdadera ventaja competitiva: es una región con una calidad de vida (a nuestro juicio) muy alta. Vivir aquí es económico comparado con ciudades como Madrid y Barcelona. Los trayectos entre casa y trabajo son cortos y eso te deja margen para tener tiempo libre y disfrutar algo más de la vida, que al final es para lo que uno trabaja. Además de esas virtudes como región, aquí hay mucho talento. Recuerdo hace años a un inversor de fuera que dijo textualmente: «me encanta venir a Asturias, realmente tenéis un nivel medio muy superior a Madrid y Barcelona. El no estar cerca de los grandes actores hace que os preparéis mucho más antes de bajar a reuniros con ellos».

Recuerdo eso con cariño, porque es muy cierto. Nosotros estamos tratando de crecer con cantera y colaborando con empresas y entidades locales en todo lo posible y es muy gratificante ver el nivel de iniciativas y disposición que te encuentras «sin salir de casa».

Ahora bien, quedan muchas trabas por solventar. Pero no son una cuestión regional, sino más bien nacional».

«Rotundamente sí. Ya no tanto por la unión de ciencia y promoción económica como tal, sino porque las personas tras el IDEPA y el CEEI tienen una capacidad y compromiso de trabajo muy alta. Como todo en esta vida habrá unas cosas mejores que otras, todos somos humanos y magia no hacen. Pero si algo han demostrado en los años que llevamos de relación con ellas, es que tienen ganas e iniciativas para ayudar a que las ideas se conviertan en startups y las startups en empresas.

Sinceramente, creo que sin el trabajo de muchas de las personas que hay tras el IDEPA y, especialmente por sus funciones, el CEEI. Muchas de las empresas que han surgido a lo largo de estos últimos años no existirían. Además, siempre se mantienen en contacto con la comunidad y la comunidad con ellas, por lo que tienen un amplio conocimiento de las necesidades del sector. Un factor clave para realizar los apoyos necesarios de manera eficaz«.

«Otra pregunta de difícil respuesta con sí o no. Sinceramente, no creemos que exista un buen o mal momento para montar una empresa. Emprender es una pelea constante que debería ir ligada a un propósito que te mantenga siempre con energía para afrontar los retos.

Por ello, debes de tener un plan que se sostenga sin falta de ayudas. Obviamente, estas ayudas económicas hacen posibles algunas ideas que de otra forma sería muy difícil o casi imposible que existieran, pero no es una buena estrategia que tu negocio dependa de este tipo de condiciones. Si no, como dice el refranero: tendrás pan para hoy y hambre para mañana».

«Tiene sus cosas buenas y sus cosas malas, como todo. En nuestro caso es una apuesta personal. Sabemos que en otros sitios podríamos crecer mucho más rápido como empresa por la diferencia en el volumen de inversión. Pero, por otro lado, si todas las personas que pensamos en emprender usamos la vía de irnos, la región nunca podrá avanzar.

Para nosotros es una apuesta, arriesgada, pero hay que hacerla. Existen grandes empresas en nuestra región que lo han conseguido, generan puestos de trabajo y eso promueve el aumento de riqueza de la zona. Si queremos que la región mejore y verla con el orgullo del que otros hablan de Silicon Valley, creemos que debemos aportar nuestro granito de arena y, en la medida de lo posible, enfocar nuestro crecimiento en la región. Y si algo ha demostrado el mundo conectado de hoy en día, es que importa poco de donde seas, porque con un click puedes alcanzar a cualquier persona en cualquier parte del mundo».