Sandra S. Ferrería
Sábado, 1 de enero 2022, 09:09
Las cifras hablan por sí solas. Cerca de 300 barcos construidos desde 1925, un 90% de producción para mercados internacionales, 43.000 metros cuadrados de instalaciones, 3.000 toneladas de acero procesadas al año, 430 empleados directos y en subcontratas. Con estos datos no es ... de extrañar que este año Astilleros Gondán haya recibido por parte del Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias (IDEPA) el Premio a la Internacionalización.
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Son muchos los motivos por los que el jurado ha apostado por Gondán. El primero de ellos su elevado nivel tecnológico, que le permite competir y ser líder en un mercado internacional altamente competitivo y exigente.
El segundo, su elevada cifra de exportaciones -un 90% de su producción-, así como el elevado liderazgo de la empresa, que desde Castropol, constituye un polo industrial y productivo de gran relevancia en Asturias.
En los últimos años Astilleros Gondán ha llevado a cabo una serie de reinversiones de sus beneficios que permiten garantizar el futuro del astillero en Castropol. En total, en la última década, Gondán ha invertido más de 20 millones de euros con los que ha mejorado sus instalaciones. Así, en 2015 llevó a cabo una renovación de grúas, mientras que en 2019 amplió la grada 1 a 16 metros.
El año pasado, en 2020, Astilleros Gondán amplió la instalación de División de Fibra, su planta orientada a la construcción de barcos tanto de transporte de pasajeros como de trabajo fabricados en resinas y fibra sin ninguna limitación tecnológica hasta una eslora de 42 metros.
Asimismo este año ha construido nuevas naves en Barres y ha procedido a la robotización de la soldadura con la instalación del robot PEMA VRWP-C en sus talleres de conformado de acero.
Tras cuatro generaciones, ahora está al frente Álvaro Platero, director general de Astilleros Gondán, una empresa que perteneciendo a un sector tradicional como es el naval, ha sabido evolucionar y reorientar su estrategia empresarial hacia el mercado internacional.
La capacidad, el compromiso, la flexibilidad, la confianza y el control, son las señas de identidad de esta empresa asturiana que la ha convertido en un referente dentro y fuera de la región.
Durante los últimos años, el astillero asturiano ha centrado sus exportaciones especialmente hacia los países nórdicos. Así, se ha adaptado a un estándar de construcción que demanda los barcos más sofisticados en el mundo tanto en términos tecnológicos como en materia de calidad.
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Así, Gondán ha entregado en los últimos 6 años un total de 12 buques para armadores noruegos, contándose entre ellos buques para el sector eólico de bajas emisiones, pesqueros, remolcadores duales e híbridos y un sofisticado buque oceanográfico.
El área de mercado en el que se desenvuelve el astillero es tremendamente exigente. Sus principales competidores se sitúan en Turquía, y cuentan con una gran ventaja económica, y es que su coste de mano de obra es cercano a la mitad de la media española, y también cuentan con un gran apoyo estatal en términos de concesiones para sus instalaciones.
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Así, Gondán se ha visto obligado a diferenciarse proporcionando un valor añadido: para mantenerse vivo en un mercado tan competitivo el astillero necesita estar en un proceso de renovación continua que lo mantenga en una posición competitiva en un mercado tan especializado.
Dentro de esta renovación continua, Astilleros Gondán está apostando fuertemente en este momento por el mercado eólico offshore. El imparable proceso hacia la descarbonización y la reducción de emisiones en el que está envuelto el mundo marítimo hacen que el sector cuente con unas perspectivas de futuro muy altas.
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En este sentido, Gondán ya ha construido dos buques dedicados al mantenimiento de campos eólicos, y cuenta con otros cuatro barcos más en cartera para este sector, situándose como uno de los mayores exponentes mundiales en la construcción de este tipo de buque.
Asimismo, el astillero ha ido incorporando a sus barcos la tecnología más innovadora del mercado. El Buque PSV 'Edda Pram' cuenta con la instalación del primer sistema propulsivo tipo Voith integrado en el sistema de posicionamiento dinámico. Es el primer buque en llevar instalada hélice de proa con tecnología Rim Drive. Por su parte, el Buque PSV 'Edda Ferd' es el primer buque con sistema de propulsión eléctrico con revoluciones variables Blue Drive. Otro ejemplo de la incorporación tecnológica es el Buque PSV 'Stril Luna', primer barco en instalar el concepto de puente unificado de Rolls Royce. Al igual que los remolcadores 'Dux/ Pax/ Audax' que son los primeros remolcadores de propulsión dual con LNG construidos en Europa. Otro ejemplo es el remolcador Vilja, un remolcador rompehielos de propulsión híbrida eléctrica, el más potente construido hasta la fecha. A ellos se suman el Buque SOV 'Edda Passat',primeros buques de mantenimiento de campos eólicos offshore construidos en España, y el Buque CSOV 'Edda Breeze', uno de los primeros preparados para operar con cero emisiones utilizando hidrógeno en forma de LOHC.
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