Asturias, entre las más rezagadas en la concesión de ayudas al autoconsumo

Basta con observar la inversión general hecha en España en 2023 para cambiar tejas por paneles solares para comprobar el auge del autoconsumo. Alcanzó los 1.863 millones de euros y se implantaron en 111.785 viviendas y 15.509 empresas. El desembolso medio en el caso de los proyectos residenciales fue de más de 6.500 euros. «Este crecimiento viene motivado por los altos precios de la energía por parte de la ciudadanía, así como por la reducción del poder adquisitivo de las familias debido al aumento de la inflación y al agotamiento de las ayudas contempladas dentro de los fondos de recuperación», explica José Donoso, director general de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF). El año pasado se instalaron 1,9 gigavatios (GW) de potencia en autoconsumo.

Ahora bien, según los datos el IDAE, aún quedan miles de subvenciones por asignar, que suman 1.094 millones de euros.

Asturias es una de las comunidades más rezagadas en la concesión de estas ayudas con respecto al presupuesto del que dispone. Ocupa el cuarto lugar por abajo de la tabla en comunidades autónomas. Supera tan solo a Extremadura, Murcia y Cantabria. Con una cantidad disponible de casi 45 millones de euros, el Principado ha concedido ayudas por 7.3 millones, cuando las solicitudes recibidas superan un importe de 37,2 millones de euros.

Los datos, de hecho, coinciden con los que ha hecho públicos recientemente la dirección general de Energía del Principado, quien indicó que se han recibido más de 3.800 solicitudes en los seis programas habilitados, y ya se han publicado once bloques de concesión de subvenciones, que suponen 836 instalaciones por importe de 7,3 millones. «La inversión total que han generado es de 29,80 millones», sostiene.

La sobredemanda no es un caso exclusivo del Principado. La hay en todo el territorio nacional. Hasta mediados del pasado mes de enero, las comunidades autónomas –que son las que conceden y verifican estas subvenciones– disponían de 1.873 millones de euros en total para repartir y las solicitudes, según el IDAE, alcanzaban los 3.183 millones de euros, un 70% más de lo presupuestado.

Desde su puesta en marcha, los gobiernos autonómicos han entregado 779 millones de euros, el 42% de esos 1.873 millones con los que cuentan para distribuir. «La complejidad de las tramitaciones administrativas al tratarse de subvenciones que tienen que cumplir los requisitos regionales, nacionales y comunitarios, unida a las dificultades para reforzarse en capital humano por las comunidades autónomas, han producido importantes retrasos en la gestión de las ayudas», señala José Donoso.

De hecho, a principios de año, este periódico tenía acceso a la documentación presentada por un particular para solicitar la ayuda para unas baterías asociadas a una instalación fotovoltaica preexistente. Se pusieron en marcha en noviembre de 2021, la petición se cursó en enero de 2022 y unos 16 meses después, en mayo de 2023, el Boletín Oficial del Principado publicó que la subvención, de algo más de 4.000 euros, estaba concedida. «Hemos metido la justificación, pero los funcionarios nos dicen que no hay gente contratada para revisar los expedientes», explicaba.

Al poco, el Principado se comprometía con la UNEF a duplicar su equipo humano para acortar plazos. Asimismo, ambos estuvieron de acuerdo en crear un equipo conjunto para identificar dificultades en el procedimiento. La consejería de Transición Ecológica le transmitirá a la UNEF los más frecuentes y la unión hará un ejercicio de difusión entre sus asociados para que las subvenciones se tramiten de la forma más adecuada, a fin de reducir plazos.

Asturias cuenta actualmente con 1.631 instalaciones fotovoltaicas con una potencia instalada de 30.235 kilovatios. En 2018 eran dieciocho con una potencia de 179 kilovatios.