«Vivir el ascenso con el Sporting, en mi casa, sería increíble»

-Enhorabuena por el ascenso.

-Muchas gracias.

-¿Esperaba acabar así la temporada?

-No me esperaba conseguir esto el primer año que salía de casa, fue una locura.

-¿Con qué expectativas iba a Ferrol?

-Buscar un salto de categoría, ayudar al equipo. Sabía que al principio lo iba a tener difícil para entrar porque está Luca Ferrone. No esperaba tener tantos minutos ni lograr el asenso.

-El Ferrol no estaba en las quinielas.

-Este año, con los equipos que había, Córdoba, Deportivo, Alcorcón, la gente no miraba mucho al Racing. Creo que hasta nos vino bien. Fuimos un poco a lo callado toda la temporada, siempre en el 'play off', y en los últimos seis partidos ganamos todo y empatamos uno, empezó a pinchar el Alcorcón y eso nos dio la victoria.

-¿Qué es lo primero que se nota en el cambio de categoría?

-La mayoría de equipos tienen jugadores que vienen de categoría profesional. El ritmo y la manera de entender el juego es algo que noté mucho. Todos los equipos, aunque estén en descenso, te lo pueden poner difícil. Hace poco vino el Badajoz, que se estaba jugando el descenso, y ganamos 2-1 casi de milagro.

-¿Cómo afrontó el cambio de jugar con gente tan curtida?

-Intenté entrenar y estar a la altura del equipo. El ritmo lo pillé rápido. Te viene muy bien, cada semana te enfrentas a un jugador que es bueno y acabas mejorando mucho. A nivel profesional he mejorado mucho y desde el punto de vista personal también se nota. Era la primera vez que salía de casa, maduras.

-¿Qué tal durmió cuando le plantearon salir del Sporting?

-En el primer equipo no había hueco porque estaban Guille (Rosas) y Pol (Valentín). La idea era que me quedara en el B, e intenté, junto con mi representante, salir. Lo hablamos con Gerardo. También con Abelardo, al que le dije que lo mejor era salir cedido y él estaba de acuerdo. En Tercera el progreso no iba a ser el mismo. Manjarín le había preguntado por mí.

-Abelardo y Manjarín tuvieron mucho que ver.

-Manjarín llamó a Abelardo para preguntar por mí y el 'Pitu' me ayudó hablando bien de mí.

-Llega a un Sporting en el que siguen Guille Rosas y Pol Valentín. ¿Cómo ve esa competencia?

-Obviamente, no es fácil. Los dos son muy buenos laterales. Tengo la ilusión de hacer la pretemporada, hacerlo lo mejor posible y que luego pase lo que tenga que pasar.

-¿No se marca ninguna meta?

-No. Haré lo que creo que intento hacer siempre: entrenar y hacer lo que está en mi mano. No quiero mirar mucho más allá.

-¿Le están saliendo 'novias'?

-No tengo ni idea. Desde que acabó la temporada, fueron días de celebración y no he hablado con nadie. Hablé un poco con mi representante, pero de nada de eso.

-¿Le pesó al inicio saber que el Sporting le seguía?

-Al principio, cuando no tenía minutos, pensaba más de la cuenta en ello y al final no estaba en mi mejor forma. Cuando empecé a tener minutos no pensaba mucho en eso porque solo tenía la cabeza aquí. Al final tuve esa progresión.

-Tras esta primera experiencia, ¿se le pierde el miedo a salir?

-Si no se da en el Sporting, no tengo el miedo que tenía el año pasado a salir. Llevaba dos años en Mareo y no veía más allá. Te das cuenta de que el fútbol no te garantiza quedarte en un sitio fijo y vas a tener que ir a otra ciudad, integrarte. No tengo miedo si me vuelve a tocar marchar.

-¿Cómo ha visto al Sporting?

-La temporada no es lo que se esperaba. Tienen buenos jugadores y sobre todo los que subieron del filial creo que cumplieron. Pero al final se tiene que aprender de lo que pasó este año. Los años que vengan el Sporting seguramente se reforzará y va a estar arriba.

-¿Le sorprendió el cambio en la política de cantera?

-Cuando debuté con el filial en 2019 había bastante gente de fuera, pero sí es verdad que éramos muchos los que subíamos del juvenil. El año que marché sí que empezaron a fichar. Apuestan por algo diferente, no conozco a los jugadores, pero creo que es algo normal. Aunque Mareo es una buena cantera, buscan algo diferente para intentar conseguir el ascenso, aunque no se logró.

-En el último ascenso del Sporting tenía 14 años. ¿Se ve en el autobús de los jugadores a final de temporada?

-Cuando ascendió sí me acuerdo de vivirlo. Este año en Ferrol fue una locura. A día de hoy se me hace inimaginable vivir algo así. Me pasaba igual en Ferrol, no soy consciente de lo que viví aquí, no te lo crees. Vivir algo así en Gijón, que es mi ciudad, sería increíble.

-Es un sueño por el que pelear.

-Es mi idea, llegar en la pretemporada, pelearlo y que el Sporting pueda volver a Primera.