Un virtuoso del balón que pone rumbo a tierras griegas

Con la previsible marcha de Manu García el Sporting pierde calidad en la zona de tres cuartos, el hábitat natural de Manu García.

Que las negociaciones ya estaban muy avanzadas se percibía estos días con facilidad. El jugador no se entrenó ayer junto al resto de sus compañeros sino que hizo una preparación específica fuera del grupo. Tampoco jugó por la tarde ante el Cartagena en el que fue el segundo partido de la pretemporada. Sí lo hizo, en cambio, el pasado miércoles ante el Racing de Santander, dejando 45 minutos de calidad, posiblemente los últimos con la camiseta del Sporting.

La marcha de Manu es también un flotador para el Sporting, que tiene una deuda de siete millones de euros y necesita además reducir su masa salarial para adaptarse al tope que marca la Liga. Desde Grecia, el presidente del Aris de Salónica, Theodoros Karipidis, celebraba a través de las redes sociales la previsible llegada de Manu García a su equipo. Si la operación se cierra, como se espera, se llevará a un jugador joven de enorme calidad.