«Este verano no va a ser posible hacer una gran revolución en el Sporting»

El Sporting cierra mañana en El Molinón ante la Ponferradina (16.15 horas) una temporada para el olvido. Tras certificar la permanencia en el fútbol profesional en la penúltima jornada con un empate en Eibar, el entrenador del conjunto rojiblanco, Miguel Ángel Ramírez, es consciente de que son necesarios cambios para conseguir un equipo «sólido y competitivo» en la próxima campaña, según afirmó ayer en la rueda de prensa semanal previa al partido. Con la competición a punto de culminar y con el único objetivo de sumar tres puntos para tratar de aumentar algo los ingresos por clasificación, las miradas se centran ya en la próxima campaña. Y, como todos los veranos, las altas y bajas están en el centro del debate. Más allá de lo que entrenador, cuerpo técnico y dirección deportiva puedan desear, la realidad es que los compromisos contractuales con muchos jugadores de la actual plantilla y las limitaciones presupuestarias serán un importante lastre a la hora de planificar la próxima temporada. «No va a ser posible hacer una revolución en el mercado de este verano. Imposible», afirmó rotundo Miguel Ángel Ramírez.

El entrenador del Sporting, que cuenta con la confianza de la propiedad de la entidad, el Grupo Orlegi, pone la vista más allá. «El club tiene que mirar a largo plazo cuántos mercados le van a posibilitar ir transformando la plantilla en lo que realmente se quiere. En un solo mercado va a ser muy complicado hacer eso». Lo que tiene claro el técnico canario tras su primera experiencia en la Segunda División española es que el fútbol actual «demanda físico, y sin eso es difícil competir. El fútbol va hacia algo físico, fuerte, rápido. Basta mirar a los grandes equipos».

La planificación de la próxima plantilla rojiblanca ya está en marcha, aunque las decisiones sobre el futuro de los jugadores o las incorporaciones «aún no están tomadas». La previsión es que el lunes haya reuniones con todos los jugadores de la plantilla, que conocerán de primera mano los planes que el club tiene para ellos. «No queremos perder el tiempo ni hacer perder el tiempo a nadie».

No se quiso mojar Miguel Ángel Ramírez sobre el modelo de equipo y juego con el que pretende contar en la próxima campaña. El técnico del Sporting cree que aquellos conjuntos que tienen mucho gol, los que basan su juego en una defensa sólida y los que lo hacen en la posesión del balón son los que mejor compiten en la categoría, aunque evitó decantarse por uno u otro. «Déjeme que me quede con los tres».

Tampoco aclaró cuáles son las posiciones que deben ser reforzadas. En lo que calificó de «proceso de consenso» con el club, Ramírez apuntó que a partir del lunes se analizarán las diferentes variables para definir «qué es los más urgente, oportuno y eficaz» para «priorizar» el refuerzo de determinadas posiciones. Lo que sí aclaró es su gusto por una plantilla con dos profesionales por puesto, «tres en casos especiales», que tire de cantera cuando las circunstancias lo exijan.

El entrenador rojiblanco dedicó palabras de elogio a la afición, a la que, apuntó, le da «vergüenza» pedirle nada. Miguel Ángel Ramírez espera que el público vuelva a responder mañana a la llamada del equipo y que se vea una buena entrada en El Molinón, aunque sea para despedir una campaña decepcionante.