El Molinón, listo para abrir sus puertas

Si los datos de la pandemia no lo desaconsejan entonces, la idea es que ese mismo fin de semana pueda haber fútbol en abierto. Eso sí, con las particularidades de la limitación de aforo y un protocolo exigente de obligado cumplimiento. Con mascarilla y sin aficiones visitantes, por supuesto. Esa primera jornada que se maneja como posibilidad, tras el desplazamiento del domingo a Butarque, al Sporting le tocará jugar en El Molinón frente al Lugo. El encuentro ha sido fijado para el lunes 10 de mayo (21 horas), cerrando la jornada. La otra alternativa es que, si no se abre la jornada 38, sea la 39. De ser así, el equipo de Gallego disputaría el que se perfila como uno de los choques decisivos del año, la visita a Montilivi para enfrentar al Girona, en un ambiente complicado. En este momento, al Sporting le quedan tres partidos en Gijón (Lugo, Las Palmas y Almería) y tres encuentros como visitante (Leganés, Girona y Fuenlabrada).

La ministra de Hacienda y portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, confirmó ayer que se trabaja en ese escenario, pero dejó en manos de Sanidad la decisión definitiva: «Ahora mismo no estamos en condiciones de confirmar ninguna cuestión, pero sí de saber que se está trabajando en esos entornos revisando, igual que en materia deportiva, en materia cultural de celebración de eventos masivos, todas estas cuestiones que estaban pendientes de que los niveles de vacunación llegaran a un determinado umbral. El Gobierno actuará siempre en cuanto al tema del público en los eventos deportivos en relación con lo que se dicte por parte de las autoridades técnicas y sanitarias».

Para el Sporting, a seis jornadas del final del curso regular y defendiendo su quinta plaza con dos puntos de ventaja sobre el Girona, sería un impulso y un valor añadido. No obstante, la vuelta que se plantea estaría limitada a un porcentaje, con unas cifras de acceso que podrían ir de los 3.000 a los 5.000 espectadores. Aunque con la experiencia de los últimos meses, con una pandemia que ha ido destrozando plazos y previsiones, los clubes, incluido el Sporting, prefieren mantener la prudencia.

Frente a este escenario, el club gijonés, como informó en su junta de accionistas, fue el primero en presentar a la Liga un protocolo de acceso a El Molinón. La propia patronal, además, ya cuenta con varias premisas básicas. Según su 'modus operandi', los aficionados serán divididos en grupos a la entrada. Y si el aforo aumentase, se habilitarían entre cuatro y cinco franjas horarias diferentes de acceso, entre la hora y media antes del inicio del partido hasta los quince minutos en el caso de colectivos vulnerables.

Aquellos abonados que deseen acudir al estadio, por otra parte, deberán enviar su inscripción previa al club en cuestión, que será el encargado de establecer los criterios de selección. Una vez en los accesos del estadio, se identificará a cada persona, que tendrá asignada una única puerta, no pudiendo acceder en caso de superar los 37,5 grados centígrados. En el estadio, el aficionado deberá llevar puesta la mascarilla durante el partido y no podrá consumir aperitivos ni bebidas. Se le darán, por contra, dos botellas de agua pequeñas a cada persona a la entrada.

Asimismo, no se podrá caminar libremente por las dependencias del estadio, pues se habilitarán recorridos específicos de entrada y salida. El espectador deberá permanecer sentado en su asiento, que será el más próximo a su butaca habitual en la medida de lo posible, y no podrá tocar o abrazar a otros aficionados. Por último, el desalojo se llevará a cabo por filas.