Sporting | «El que mejor conoce la plantilla es el técnico»

EL COMERCIO recaba distintas opiniones entre exjugadores, facultativos, especialistas y también aficionados sobre una decisión, al menos, controvertida. No lo consideran asi las opiniones recabadas por este periódico entre los exprofesionales: el técnico catalán ha sido coherente con los mensajes que había trasladado en las últimas semanas. Y que ya había dejado caer que no regalaría la posición de titular a nadie, expresando también su satisfacción con el rendimiento del grupo que fue capaz de superar la peliaguda situación deportiva e institucional con una sola derrota en Copa del Rey, e invictos hasta el domingo en Liga. De ahí a que varias voces observen en el once del técnico de Suria un premio al esfuerzo de esos jugadores, muchos con un protagonismo muy reducido antes de la aparición del virus. «Ha dado el mensaje interno que tenía que dar en esta situación. Yo habría hecho lo mismo seguro en su lugar. Ha actuado bien porque ha premiado a los jugadores que habían participado estas semanas. Creo que a pesar de la derrota ha recuperado a algunos futbolistas que no estaban teniendo minutos. Si no los llega a poner otra vez a las primeras de cambio después de lo que han hecho estas semanas, que han sido muy complicadas, los habría sentenciado para lo que queda de Liga. Gallego los necesita a todos», expresa el exjugador rojiblanco, ahora técnico, López Garai, que mantiene que la derrota influye notablemente en la lectura que se hace de la alineación: «Se habla siempre después del resultado».

Dentro de las distintas interpretaciones, hay quienes observaron que en el once inicial había letra pequeña que se escapaba del ámbito deportivo. La mayoría, en cualquier caso, no ven que haya castigo, considerando que el principal agraviado sería el entrenador. Y sí en la comentada decisión más bien un reconocimiento a los que habían participado estas semanas tan condicionadas por la covid. Así lo observa Jano Murias, de la Peña Sportinguista de Vegadeo. «Ha premiado a los jugadores que no estaban participando. No es un castigo, es un voto de confianza».

«Habrá puesto el once que consideraba que estaba en mejores condiciones. Al equipo que pensaba que iba a ganar. No creo que quisiera perder», defiende también Adrián Nuñez, presidente de UNIPES. Muchos, eso sí, creen que es el técnico rojiblanco quien mejor conoce el estado de sus efectivos, sobre todo a la hora de analizar situaciones con un alcance tan difícil de pronosticar como es el regreso a la competición después de pasar por el virus, que ha afectado también al rendimiento de algunos deportistas profesionales debido a las consecuencias físicas que deja.

Entra en escena Carlos García Cuervo: «No veo castigo. Eso sería castigarse a uno mismo. Creo que estaba contento con el rendimiento de los que venían participando». Una lectura que comparte Eloy Olaya. «El que mejor conoce el estado de la plantilla es el propio David Gallego. Nadie sabe mejor cómo están los jugadores que el propio entrenador», comenta el exjugador. Interviene en esa misma línea de apoyo al preparador del Sporting Juanele. Dice el 'Pichón' de Roces que no tiene sentido que el técnico catalán no apueste por los mejores, ya que «los entrenadores no se tiran piedras contra su tejado». Un pensamiento que confirma Tati Alcalde: «Fue elegante con los futbolistas que venían participando. No creo que sea una decisión correctiva». Repite lo dicho por Juanele : «Nadie se tira piedras contra su tejado».

En el debate aparece un elemento que las opiniones recabadas consideran sustancial a la hora de interpretar el equipo que plasmó el técnico en Castalia: el aspecto físico de los afectados por la covid. Creen que esa ha sido una de las posibles claves para entender la elección, sobre todo por el largo periodo de inactividad en un deporte que exige más del 100% para competir.«La decisión que ha terminado por tomar David Gallego seguro que ha sido consensuada entre los técnicos y los médicos», explica desde la distancia el experimentado entrenador Paco Jémez.

También hay quienes defienden la elección inicial del preparador. Gallego distinguió entre estar a disposición, y que los afectados por la covid estuvieran para participar durante noventa minutos al alto nivel después de un periodo de ausencia de casi un mes. Comentan que una cosa es que los afectados tuvieran síntomas leves o fueran asintomáticos y que se hubieran ejercitado en sus domicilios durante estas semanas y otra muy distinta que su estado de forma fuera el óptimo para competir. Aparece en la charla Gerardo Ruiz, un especialista en el acondicionamiento físico de deportistas de alto nivel. «Después de días de enfermedad es contraproducente jugar. Además te expones a que haya lesiones musculares. Creo que hay gente en la plantilla que pueden tener la oportunidad», apostilla.

Hay, eso sí, más miga en la elección del portero, una posición estratégica y donde las diferencias entre el titular y el suplente son muy importantes. «Quizás en la única duda estaba en la portería», reflexiona Eloy Olaya. Existen opiniones más diversas sobre la conveniencia de que hubiera regresado ya en este primer partido sin contagiados Diego Mariño para reemplazar a Christian Joel. Algunos también creen que sería injusto descabalgar del once al cubano que, de la misma forma que sus compañeros, se merecía mantenerse en el equipo titular después de ser uno de los activos durante el tiempo de baja del gallego. Añaden a renglón seguido que por más que hubiera estado Mariño el rendimiento de Joel no tuvo incidencia alguna después en el marcador, y que poco o nada pudo hacer el en los goles. «Mariño es el mejor portero de la categoría. Hay mucha diferencia entre él y los demás. Pero el primer gol es un golazo. No puede hacer nada Joel. No se le puede achacar en absoluto», reflexiona García Cuervo.

Mientras que en distintos sectores sí que consideran que la lectura posterior del partido por parte del técnico catalán no fue la mejor, dejando a un lado lo decidido inicialmente, ya que tardó en reaccionar, y solo lo hizo cuando el marcador era de 2-0. «Manu o Pedro podrían haber entrado con el 1-0. Prescindir de ellos es un lujo. Aunque creo que se mezcló todo. Hubo también un premio a los jugadores que venían jugando», sostiene Víctor Valero, de la Peña sportinguista de Cuenca. «Hay jugadores que forman el eje central que tienen que jugar: Djuka, Manu, Babin y Mariño», afirma García Cuervo.