El Sporting dimite en Zaragoza

Que el portero sea el mejor jugador del Sporting dejó de ser noticiable hace mucho tiempo. En este caso, en lugar de ser Diego Mariño, el rojiblanco más destacado fue Dani Martín. Un hecho que deja al canterano en un buen lugar, pero evidencia al resto del equipo.

La vida en el Sporting sigue igual. Perdidos en mitad de la tabla, a lo que además hay que añadir la sensación que transmiten los jugadores, un tanto desenganchados por algunos momentos ante la imposibilidad de alcanzar al sexto puesto.

Tras un empate insulso ante el Lugo en casa, el Sporting viajó a la capital maña para lavar la imagen del último mes. Un objetivo que estuvo muy lejos de lograrse. Todo pese a la actuación de Robin Lod, que marcó en dos ocasiones para adelantar a los rojiblancos. No sirvió para nada.

Una vez más, el cuadro dirigido por José Alberto se excedió en el juego directo. El centro del campo, salvo Cofie en la parcela defensiva, no aportó en ataque. No es novedad. La ausencia de Méndez se notó para dar cierta pausa con el balón, lo que complicó que el equipo creciera en el campo rival.

Cierto es que el Sporting lo intentó y se llevó más castigo del que merecía cuando quiso adueñarse del encuentro. Fue en los primeros minutos de la segunda mitad tras el segundo tanto de Lod. Víctor Fernández movió el banquillo y Papu le respondió nada más pisar el verde. Aprovechó un balón muerto en el área para empatar. Cuatro minutos después, Álvaro firmó su particular doblete para hacer realidad la remontada.

El delantero remató a placer, tal y como sucedió en su primer tanto antes del descanso. La defensa hizo aguas en La Romareda. Perdida, sin orden y además con mínimas ayudas de los hombres de ataque, que en varias ocasiones dejaron a Gerlades y a Molinero sin opciones de defender los ataque del Zaragoza por las bandas. Precisamente desde los costados llegaron dos de los cuatro tantos que encajó el Sporting.

Antes de que el Sporting mejorase y viera como se le iba el partido, los rojiblancos se encontraron con un gol de Lod tras un grave fallo del defensa Muñoz. En un intento por cederle el balón a su portero, asistió a Djurdjevic que esperó la entrada de Alegría y Lod en el área. El finés no perdonó desde el punto de penalti.

El cuarto gol llegó ya en el tiempo añadido. Gual, otro de los cambios de Víctor Fernández, marcó en una jugada que pudo ser anulada ya que el balón pudo traspasar la línea de fondo antes del centro. Triste adiós para un equipo que se queda sin opciones de luchar por nada a falta de tres jornadas para el final de la competición.