«Juntos, equipo y afición, somos capaces de todo»

En el último minuto de intervención, Rubén Baraja dejó su arenga más sonora y reivindicativa. «¡Nuestra única posibilidad de volver a jugar en Primera, en la élite, es el 'play off'!», proclamó el técnico, agitador de un ambiente extraño. «Tenemos que jugar este 'play off' desde el inicio de la semana, dar valor a lo que significa esta oportunidad que no van a tener muchos equipos. Vamos a confiar en el equipo, a darle aliento y creer en él. Si todos estamos unidos, todo es posible», remarcó.

Lo de ayer se convirtió en una reivindicación de la candidatura del Sporting. Pero, sobre todo, en un SOS al sportinguismo para que El Molinón recupere su personalidad más infernal y apasionada desde el domingo, abonando el terreno para el choque decisivo de la eliminatoria. «Juntos, equipo y afición, somos capaces de todo», reiteró de forma machacona. «Para conseguir el ascenso necesitamos que la gente esté enchufada ya», pidió. Volviendo una y otra vez sobre sus pasos: «Necesitamos que la gente de Gijón sienta que el 'play off' es para nosotros a vida o muerte».

Atrás quedaba el equipo, el análisis del momento. El reseteo de Baraja fue total. Nada de mirar a lo último, enterrando lo sucedido en Córdoba, salvo para recordar que «conviene no olvidar nunca de dónde venimos, cuáles fueron nuestros principios. Hemos tenido que trabajar mucho para disfrutar de un 'play off'». Con remango y sudor, subrayó, se levantó el Sporting tras el trastazo que se dio en el Tartiere. «No sirven de nada las dinámica anteriores. La única realidad es que nos hemos ganado y merecemos estar en esta eliminatoria», resaltó, asegurando que «no me veo ni favorito, ni inferior, ni superior a nadie. Vamos a tratar de ser nosotros en este 'play off'».

Recuerdo para Preciado

Incidió en las líneas maestras de su propuesta, martilleante. «Es importante ser sólidos atrás, porque nos dará la posibilidad de estar en la eliminatoria», dijo. Luego, prolongó, «lo más importante es que seamos fieles a lo que hemos sido y nos ha traído hasta aquí». Y, avisó, «no es el momento de recular, ni especular». De camino a Zorrilla, Baraja, que tuvo un cariñoso recuerdo para Preciado en el sexto aniversario de su fallecimiento -«para mí es un ejemplo»-, deslizó sobre el momento de Jony que «llega en un buen momento de confianza y físico», agregando que «espero que a través de él seamos determinantes y marquemos diferencias».