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La reforma integral del césped de El Molinón, en marcha

La reforma integral del terreno de juego de El Molinón arrancó ayer por la mañana con los primeros trabajos dentro del estadio y en su entorno. A primera hora se cerró al tráfico la avenida de Enrique Castro 'Quini', una vía que ha quedado vallada y que, desde ayer, es utilizada para la entrada y salida de los camiones al interior del estadio. Esta calle permanecerá cortada hasta que finalicen los trabajos, a mediados del mes de agosto, si se cumplen los plazos que maneja el Sporting.

En principio, el nuevo terreno de juego estará listo para la primera jornada de la nueva temporada, que se disputará el fin de semana del 12 y 13 de agosto. Desde el club han puesto el énfasis en la máxima coordinación de todas las operaciones al trabajar contrarreloj para cumplir los plazos.

Una de las primeras acciones llevadas a cabo ayer por los operarios fue la retirada de las porterías y la 'u' televisiva, lo que dio paso al movimiento de los primeros camiones encargados de vaciar el actual rectángulo de juego. El tepe actual de El Molinón comenzó a ser enrollado para su traslado a la Escuela de Fútbol de Mareo, donde será reutilizado en algunos de los campos de entrenamiento.

Esta importante actuación integral sobre el terreno de juego es una obra que el club solo ha acometido otras dos veces en los últimos cincuenta años, en 1972 y 1998. En esta ocasión, los trabajos están dirigidos por Eva Sánchez-Céspedes, directora de mantenimiento de terrenos de juego y jardinería del Sporting desde el pasado mes de diciembre.

La ejecución de la obra se le ha encargado a la empresa vasca Laziturri, que lleva ya desde que terminó la competición trabajando en una remodelación similar del campo número 2 de Mareo, lugar habitual de entrenamiento del primer equipo y que contará con un césped nuevo propio, por lo que el que se está retirando de El Molinón será reutilizado en otros campos.

La intervención que se está acometiendo supone el vaciado total del terreno de juego actual, hasta los 40 centímetros de profundidad, removiendo aproximadamente unos 3.200 metros cúbicos de material. A continuación, tras la renovación del sistema de drenaje -renovado por última vez en 2017- se creará un nuevo perfil de estratos con gravas, arenas de sílice específicas y el tepe. Este último vendrá desde Portugal en camiones especialmente preparados con refrigeración para que el nuevo verde no sufra problemas de fermentación u hongos durante el traslado.

Los rollos con los 7.600 metros cuadrados llegarán a Gijón en 21 camiones, durante tres días consecutivos, a razón de siete camiones por jornada. Para la elección del tipo de césped, se ha tenido en cuenta la tipología del clima gijonés. Su colocación culminará esta reforma integral que el Sporting no acometía desde 1998. El club afrontará esta obra con fondos CVC, sin que haya trascendido su presupuesto.

Desde 1998, el Sporting solo había hecho los regenerados de tepe necesarios en el campo, que implican pinchar y mantener el césped. Solo en 2002 y en 2017 se realizaron labores de decapado, lo que implicó levantar la parte vegetal y la capa fina de la arena inferior para su renovación total, una operación que los clubes realizan cada poco. En 2017 se cambió el drenaje y se actualizó el sistema de riego a través de zanjas abiertas en el campo, una operación que realizó la empresa gijonesa Jarpa, encargada del mantenimiento de El Molinón y Mareo desde 2006 hasta el pasado 31 de mayo.

Con motivo del inicio de los trabajos de reforma del terreno de juego, el Sporting anunció ayer que tanto El Molinón Tour, como el Escape Room del estadio permanecerán cerrados hasta el próximo 20 de agosto.

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