Proyecto de reforma presentado por el Grupo Orlegi, con rampas rodeando todo el estadio. RSG

El proyecto de El Molinón saldrá a concurso si Gijón es sede mundialista

Será necesario aclarar qué ocurrirá con las concesiones de negocios y con la envolvente realizada por el artista Joaquín Vaquero Turcios

Lunes, 12 de febrero 2024, 00:30

El proyecto de remodelación del estadio de El Molinón presentado el sábado por los responsables del Sporting y de Orlegi ha llamado mucho la atención por su diseño y por su estilo vanguardista. Pero llevarlo a la práctica puede no ser tan sencillo ... como se podría pensar en un primer momento.

Publicidad

El primer punto que hay que tener en cuenta es que se trata de un edificio municipal y es al Ayuntamiento de Gijón a quien le corresponde su gestión. Una de las premisas es que cualquier actuación que se haga en el estadio tiene que ser mediante un concurso público.

El proyecto elaborado por el arquitecto mexicano Fernando Sordo Madaleno está en una fase muy embrionaria y, en el caso de que Gijón sea elegida como ciudad sede del Mundial 2030, será necesario convocar un concurso de ideas y el trabajo de Sordo Madaleno podrá ser el vencedor del proceso o no. Por lo tanto, no se puede considerar como seguro el proyecto presentado por Orlegi Sports.

Así será el nuevo Molinón

Por otro lado, en los bajos de El Molinón hay una serie de negocios, desde locales de hostelería hasta un supermercado, un gran gimnasio y una clínica, entre otros, que cuentan con una concesión con una duración de 50 años. El planteamiento del club rojiblanco es que esos establecimientos cesen su actividad durante el tiempo que duren las obras y las retomen una vez concluida. Es una postura que gran parte de los concesionarios rechazan, ya que deberían ser indemnizados por el tiempo que no pudieran estar activos. Pero el problema radica en que se trata de concesiones municipales, en las que Orlegi Sports no debería entrar, y toda la responsabilidad recaería en el propio Ayuntamiento de Gijón. Además, algunos de los concesionarios, caso del gimnasio Metropolitan, hace poco tiempo acometió una inversión millonaria para mejorar sus instalaciones.

Publicidad

Un tercer punto importante, aunque a algunos les podría parecer menor, es la envolvente actual del estadio. Está catalogada como una escultura, ya que tiene un gran valor artístico. Desde enero de 2011, El Molinón luce una 'vestimenta' diseñada por Joaquín Vaquero Turcios. En agosto del año anterior ya se había colocado la piel textil en la grada norte. Por lo tanto, se trata de una obra de arte catalogada como tal y que habría que pensar qué hacer con ella si se decide eliminar del diseño del estadio. No es algo fácil, pues está ideada para lucir específicamente donde se encuentra instalada.

Estos son tres aspectos que han de ser analizados tanto por los responsables de Patrimonio del Ayuntamiento de Gijón -que deberán aclarar todos los procesos administrativos necesarios, así como las posibles responsabilidades- como por los del Grupo Orlegi y el propio Sporting, ya que se verán claramente afectados si, como se presentó el pasado sábado, se pretende acometer una reforma en la que se incluyan diez rampas de acceso (con una inclinación del 6%) que rodeen la estructura ovalada del campo.

Publicidad

Más público

El objetivo para tener un estadio digno de ser sede del Mundial es que El Molinón tenga un aforo de 42.650 localidades, aunque una vez pasada la cita mundialista se reducirá a los 33.650. En la zona más alta, a unos 30 metros de altura, se prevén espacios hosteleros que contarán con amplias terrazas desde las que disfrutar de las vistas de la ciudad. También podrían albergar un espacio cultural itinerante para exposiciones. El estadio verá ampliada su superficie en 44.460 metros cuadrados, de los que 12.600 servirán para aumentar la actual oferta gastronómica, comercial y cultural.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad