Sporting | Más que un partido

El Sporting solo tiene ojos desde el lunes para el Racing. Y no es para menos. En Gijón ha saltado la alarma a falta de quince partidos para el desenlace de la temporada, con una amenaza real de caer a los puestos de descenso y poner en riesgo esa condición de miembro del selecto grupo de clubes que nunca han salido del circuito profesional. «El del domingo va a ser un partido importantísimo», se reconoce en la casa sin tapujos. Esta mañana, Djukic dirigirá el primer entrenamiento a la caza y captura de su primer éxito como visitante. Y de romper una serie de diabólicas estadísticas: el último triunfo sportinguista en El Sardinero se remonta al 8 de noviembre de 1986 (1-2, con goles de Joaquín y Eloy) y el Sporting solo ha sido capaz de ganar este año dos partidos como forastero. En Lugo y Elche. Suya es la segunda peor estadística de la categoría.

Hay otra variable que esconde la contienda y oculta la situación del Racing, último clasificado. La impresión que se traslada desde Santander no es la de un farolillo rojo al uso. «He visto jugar bastante al Racing este año y su situación no se corresponde mucho con la clasificación. No va a ser un partido nada sencillo para el Sporting tal y como está uno y otro, sobre todo con la llegada del nuevo entrenador», avisa un exfutbolista militante en los dos equipos. «Venir a Santander y ganar al Racing, pese a la situación, no es nada fácil para los equipos contrarios. Ha sumado quince empates y ha perdido muchos partidos en el último minuto», remata Sergio Matabuena, otro 'ex'. Concretamente, el equipo cántabro, que ahora dirige el valenciano José Luis Oltra, ha perdido puntos en siete finales de partido a los que llegó igualado con sus oponentes. Dos se resolvieron en el minuto 85, con una derrota y un empate. Los cinco restantes, en la prolongación. «Pero eso no va a pasar siempre y habla un poco de cómo han tenido que sufrir algunos equipos para ganar al Racing», concluyen desde Santander.

La situación es agónica para los locales y preocupante para el Sporting, que es la primera vez que se encuentra en este pellejo con el Racing, con el que comparte mucha historia. Pero ningún episodio reciente guarda parentesco con lo de ahora. En la 2009-2010, el Racing salvó la categoría en Primera con una victoria contra el Sporting. Un año después se dio la misma situación, pero con los papeles invertidos. Atrás quedan esos años. Y más atrás, otros más felices. Esos en los que Quini atormentaba al Racing, convertido en su principal quebradero de cabeza y confirmado como el despiadado goleador que era. Le hizo la friolera de 9 goles en 14 partidos, 5 con la camiseta del Sporting -el que más- y 4 con la del Barcelona. Otro 'recordman' rojiblanco en los encuentros ante el Racing fue Molinucu, quien llegó a jugar hasta 15 partidos contra los cántabros.

La coyuntura actual es harto compleja para dos clubes que compartieron pasado y grandes figuras, sobresaliendo Vicente Miera, Marcelino García y, por supuesto, Manuel Preciado, que siempre estará muy presente en este clásico. «El Racing-Sporting es un partido especial para recordarle porque donde más se le quiere es en su 'tierruca' y en Gijón, con todo lo que hizo allí», confirma José Luis Oltra.

En El Molinón también goleó David Barral, que apura sus últimos remates en Santander y al que podría sacar del ostracismo el valenciano. Incluso jugar con el gaditano este fin de semana la baza motivacional, algo que se rumorea ya en Cantabria. «Voy a intentar sacarle rendimiento», desliza Oltra. La información que llega desde Santander anuncia la mejor entrada de la temporada para el domingo, con una campaña popular que ha puesto en marcha el Racing y los más de 2.000 aficionados que se pondrán en ruta el domingo. Más que un partido.