«Es un palo, no hemos ganado por un centímetro», sostienen los rojiblancos

Los jugadores del Sporting estaban intranquilos y desconcertados después del partido de ayer ante el Alavés. El gol anulado a Campuzano y las escasas explicaciones por parte de los colegiados les dejaba con la miel en los labios. Para el defensa Bruno el resultado final fue «un palo». El canario explicó que el equipo «ya se veía con tres victorias seguidas» y aseguró que al no poder hacer nada en esa jugada «solo nos queda seguir». «El VAR ha tardado un poquito en ver qué es lo que pasaba. Nosotros preguntábamos y solo nos decían que era muy justo. La tecnología está para ayudar y todos nos tenemos que adaptar a ella».

Bruno, que repetía titularidad en lugar de Marsà, aseguró que al menos se iban con la conciencia tranquila al haber «empatado ante un gran equipo».

Por su parte, Nacho Martín, se iba triste. «Fue una pena celebrar un gol merecido, pero si el VAR dijo que era fuera de juego es que así habría sido, no podemos hacer nada». El canterano reconocía no haber visto la acción, pero apuntaba que a veces «se revisan mucho las jugadas».

Martín agradeció las palabras de Ramírez en las que alabó su juego y dijo que le gusta ayudar al equipo y que esperaba poder seguir haciéndolo desde dentro del campo.