Salvo un cambio radical en el pensamiento, la candidatura de El Molinón a ser sede mundialista no contará con el respaldo del Oviedo ni del Ayuntamiento. Ni el club azul ni el Consistorio se han manifestado públicamente, pero, según fuentes consultadas cercanas a ... ambos, la postura que está prevista hoy es la de mantenerse al margen del proyecto que pilota Orlegi y con el que pretende integrar a toda la región: 'Asturias 2030'.
Publicidad
La posición del Oviedo, gestionado por Pachuca, ya se asume en Mareo, toda vez que es el gran rival de Orlegi en el fútbol mexicano y no existe una buena relación. Su rivalidad nació hace varios años, iniciándose en una negociación para comercializar los derechos televisivos de la Selección de México. Uno de los requisitos que se imponen para albergar un mundial es contar con dos subsedes a una distancia máxima de 40 kilómetros. Y una se prevé que sea Avilés, que hasta el momento ha visto la cita mundialista como una oportunidad, con una opinión favorable.
Pero Oviedo, en este momento, prefiere ponerse de perfil y no participar, lo que abre la puerta a otras posibilidades, salvo una mediación del Principado, que se ha mostrado favorable al proyecto sobre el papel. Se da la casualidad de que tanto Oviedo como Gijón fueron sedes en el Mundial de 1982, del que se cumplieron cuarenta años el pasado verano.
Los requisitos de la Federación para ser subsede (centro de entrenamiento) son, en ese sentido, disponer de dos campos de fútbol con las mismas dimensiones y la misma hierba que la sede principal, con una instalación cerrada al público y con servicios complementarios: vestuarios, salas para la recuperación de los futbolistas, un centro médico, un gimnasio, una sala de reuniones y una iluminación de primer nivel. No se exige tener un estadio profesional al uso, como podría ser el Tartiere, pero estos 'servicios complementarios' deberán ser de primera categoría, equivalentes a los de un estadio 4 estrellas. Esto se podría subsanar, pero se necesitaría de un terreno que acoja esa subsede, inversión y obras.
Publicidad
Al margen del distanciamiento de Oviedo, el Grupo Orlegi sigue con su hoja de ruta, aunque dejará pasar esta semana para reunirse con el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Gijón y tratar de limar asperezas por el diferente sentido de los proyectos que fueron presentados en la ciudad (una remodelación de El Molinón y una ampliación de la grada), y, después, en Madrid (un macroproyecto con la creación de un nuevo estadio integrado a un nuevo entorno, necesitando de 300 millones de euros).
Noticia Relacionada
El lunes o martes tendrá lugar esa reunión con el Ayuntamiento, con la gran incógnita de si asistirá Alejandro Irarragorri. En principio, no está previsto que el presidente del consejo de administración del Sporting vea en directo el partido de mañana en El Molinón, encontrándose fuera de España, aunque podría regresar a Gijón a comienzos de la semana. El que sí se encuentra en la ciudad es Martin Hollaender, vicepresidente del consejo.
Publicidad
Los ecos del Mundial llegaron hasta el vestuario del Sporting, con 'Cali' Izquierdoz mostrando su confianza en el trabajo de Orlegi, grupo con el que mantiene una estrecha relación desde su fichaje por el Santos Laguna. «Si tienen el Mundial como una posibilidad van a tratar de conseguirlo. Lo que esté en su mano, lo van a hacer, pero no dependerá exclusivamente de ellos», aseguró el central argentino, quien observó que «sería muy bonito para Gijón». Y se preguntó: «¿Por qué no ilusionarse con algo como eso?».
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.