«Ojalá pueda encontrar aquí en casa la estabilidad que necesito»

«Es una apuesta del club y mía importante. Ojalá encuentre aquí en casa esa estabilidad que necesito y me falta. Seguro que se dan todos los condicionantes para conseguirlo», afirmó convencido. Hastiado de escalas en una trayectoria deportiva nómada, con seis camisetas distintas en los cinco últimos años, mostró sus ganas de encarar la pretemporada después de varios veranos sin una puesta a punto estival libre de obstáculos para completar una y agradeció a todos los que hicieron posible su «vuelta a casa». Un concepto que subrayó en su puesta de largo como sportinguista un joven habituado a las mudanzas en cada mercado de traspasos.

«Cuando entré en el cargo fue una obcecación mía poder traerlo», aseguró Javi Rico aportando la visión de la otra parte del viejo anhelo, clave para culminar una operación fraguada con paciencia para que los caminos de Christian Rivera y el Sporting se volviesen a unir siete años después de separarse de forma abrupta. Su frustrada salida en su día rumbo a la cantera del Atlético de Madrid desembocó en su posterior llegada al Oviedo. El Requexón fue su trampolín hacia el Eibar, donde arrancó un trasiego entre Primera y Segunda con escalas en Leganés, Huesca, Girona y Las Palmas.

«Lo que puedo aportar a muchos chavales de Mareo es demostrarles que como en casa no se está en ningún lado. He estado muchos años fuera y estoy encantando de volver», argumentó el mediocentro, que considera que su experiencia puede servir a los jóvenes «que tengan en mente irse o lo puedan pensar en algún momento». Incluso para aquellos que como él aspiren a regresar en el futuro. «Vuelvo para disfrutar de esta camiseta en El Molinón», señaló en un vídeo filmado por la entidad en las instalaciones rojiblancas en el que el histórico capitán, Joaquín Alonso, le da la bienvenida. «Desde que me marché ha cambiado prácticamente todo, quedan las ganas de querer ser futbolista e ir a más», señaló como cierre de su presentación subrayando las diferencias entre el juvenil que salió de Mareo y el que ahora regresa con más de un centenar de partidos en su currículo profesional.

El Sporting será el octavo club en ese recorrido dentro de las dos primeras categorías del fútbol español y parte con la ventaja de conocer a varios de sus nuevos compañeros de vestuario fruto de los años vividos en la cantera rojiblanca. Ayer se reencontró con varios de ellos, tras superar el reconocimiento médico y obtener el resultado favorable en el preceptivo test anticovid para cumplir con el protocolo antes de ponerse a las órdenes de David Gallego en la sesión vespertina, marcada por la exigencia física para los centrocampistas y los zagueros.

Javi Rico le agradeció ayer públicamente su voluntad para que se llevase a cabo la operación, reflejada en su «esfuerzo deportivo y en otros aspectos». El pivote aludió de manera sucinta al factor económico que facilitó su desembarco en El Molinón, aparejado a la diferencia en los emolumentos percibidos en su contrato con la entidad insular para alcanzar su propósito. «Me acuerdo de cuando éramos alevines o infantiles, que veníamos aquí a la esquina norte a ver al primer equipo y todos soñábamos con jugar en El Molinón. Puedo decir que lo he cumplido y ojalá sea para mucho tiempo», señaló el centrocampista, que se considera «un jugador completo».

«No soy un diez en nada, pero tampoco un cinco. Soy un jugador de equipo, de trabajo», puntualizó sobre su desempeño sobre el césped. Fuera de él, ha tenido que convivir en los últimos años con la etiqueta de díscolo. «Nunca he tenido ningún problema con ningún compañero. Siempre han sido fuera del campo» matizó el gijonés, que apostilló convencido que «en casa irá todo bien seguro». Por ese conocimiento del entorno, es plenamente consciente de dónde está el listón: «Vengo a un club que es de Primera y nuestro objetivo tiene que ser el de subir claramente».

«Feliz» por poder presentar a Christian Rivera, al que definió como «un mediocentro muy completo en todos los aspectos», Javi Rico anticipó que la previsión es que la del centrocampista gijonés no sea la última bienvenida esperada en Mareo para los próximos días. «Esta semana puede haber alguna incorporación más», reconoció el director deportivo del Sporting, que espera la llegada de Juan Berrocal y afirmó que no hay novedades sobre Djuka.