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A. MENÉNDEZ
GIJÓN.
Jueves, 1 de abril 2021, 03:50
«No nos sorprende para nada», dicen los más cercanos a Pedro Díaz al ser preguntados por su 'golazo' en Vallecas ante el Rayo Vallecano, conocedores del golpeo de balón que tiene este completo centrocampista cocinado en Mareo tras ser reclutado antes por ... Rogelio García. «Fue una jugada rápida y confíe en mi disparo», dijo sin darse demasiada importancia el jugador después de protagonizar un tanto desde más de 30 metros que oposita a convertirse en el mejor gol de la temporada en la categoría.
Es el tercero del canterano este curso, segundo máximo goleador del equipo tras Djuka (20) y clave para que el Sporting se llevara la victoria en un escenario tan importante como era Vallecas para poner más tierra de por medio sobre sus perseguidores en la lucha por hacerse con una plaza en el 'play off'. «¡Son tres puntazos!», exclamó el goleador. Un futbolista que se comporta igual de natural y espontáneo en el campo que delante de los micrófonos.
Marcó Pedro y todos se dejaron llevar por la emoción de la celebración. Todos menos el entrenador. David Gallego no se inmutó y se fue tan poco gestual como siempre y a prisas a dar instrucciones a Pablo García en la banda. El sierense lo celebró a su manera. Sin alardes. Cerró el puño, hizo un gesto sutil, se encogió de hombros con los piropos de sus compañeros y regresó a su posición, sabedor de que todavía quedaban por delante muchos minutos para remar y llevarse la victoria de Vallecas.
«Ha marcado este gol más veces, pero en esta ocasión tiene más repercusión que en otras porque se trata de un tanto muy importante para el equipo rojiblanco y que sirve para ganar el partido», explican desde el entorno del jugador sobre el fenomenal golpeo que tiene este centrocampista que parece solo marcar 'golazos'.
Como el que hizo de falta directa contra el Fuenlabrada en El Molinón en enero de 2020, se trata de un tanto 'marca de la casa' por parte del centrocampista rojiblanco, al que los técnicos le piden intentarlo en más ocasiones desde media y larga distancia, sabedores de su potencial.
Pedro ya marcó un tanto muy parecido, casi una réplica de éste. Fue el 29 de abril de 2019 en Lezama. En el Ecuador de la segunda parte de un Bilbao Athletic- Sporting B. Pedro apenas levantó la cabeza para mirar al portero del Athletic y se sacó de la manga un derechazo imposible para el guardameta Etxebarria, que se coló por la misma escuadra. Igual que hizo de nuevo este mismo martes en la portería de Luca Zidane. Después, Pelayo Morilla redondeó la faena, con el 0-2, para garantizar la victoria del Sporting B.
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