El Molinón rinde un sentido homenaje a Marcelino Gutiérrez

Con su viuda, María Luz Ania, y uno de sus tíos José Antonio Viso en el palco, la noche transcurría como una más: animada música de ambiente, cánticos y aplausos en la grada antes del inicio del partido, sorteo de campos. Pero todo se paró para rendir homenaje a una figura clave del periodismo asturiano de los últimos tiempos que se fue muy pronto, a los 48 años, dejando un vacío enorme en su Redacción y en la sociedad asturiana.

En el descanso, con los más altos responsables del Grupo Orlegi en el palco, Alejandro Irarragorri, presidente del consejo de Administración del Sporting; David Guerra, presidente ejecutivo de la entidad; y Joaquín Alonso, responsable de Relaciones Institucionales del club, entregaron a María Luz Ania una reproducción enmarcada de la página que publicó este diario en la primera visita de la nueva propiedad del Sporting al periódico. La página incluía además una sentida dedicatoria. «En recuerdo de Marcelino Gutiérrez González, periodista asturiano y director de EL COMERCIO y LA VOZ DE AVILÉS desde 2016 a 2023, por el afecto y el cariño que siempre mostró hacia el Real Sporting de Gijón».

El propio presidente del consejo de administración, que se mostró muy cariñoso en el palco con la familia de Marcelino Gutiérrez, quiso destacar la figura del periodista. «El Real Sporting ha querido recordar a Marcelino por su cercanía y lealtad al club durante tantos años. Le echaremos de menos. Ese silencio de El Molinón es el respeto que él se ganó en Asturias con su trabajo y su forma de ser», afirmó.

La carrera de Marcelino Gutiérrez ha estado ligada desde siempre a la prensa escrita y a una cabecera, esta, que le vio crecer como profesional hasta hacerse con la dirección del diario. Llegado como becario, pronto se dieron cuenta los responsables de estas páginas que lo suyo era puro talento: para oler la noticia, seguirla, tratarla y ponerla negro sobre blanco con un estilo propio. Eso que dan ahora en llamar viejo periodismo, el que se hace con calidad, sin estridencias y de manera rigurosa, fue la seña de identidad de un profesional de gran talla que, desde su fallecimiento ha recibido el reconocimiento público de toda la sociedad asturiana, algo que ya tenía en privado.

Sus inicios fueron en Gijón, pero pronto fue enviado a Llanes a poner en marcha la edición de Oriente de este diario. A su vuelta a la ciudad, asumió las jefaturas de las áreas Gijón-Asturias y reorganizó la red de corresponsalías y la coordinación de información local de las cuatro ediciones de este diario. En el año 2010, doce después de llegar a esta cabecera, fue nombrado jefe de Edición y del área de Internet, un puesto desde el que impulsó la transformación digital del periódico.

A Marcelino Gutiérrez nada le era ajeno, menos el Sporting. Nacido en San Martín del Rey Aurelio, el trabajo le llevó a Gijón, donde se empapó hasta el tuétano de la idiosincrasia de esta ciudad. Y en ella no podía faltar el Sporting. La atención que le dedicó durante su vida profesional fue máxima, sabedor de la importancia que este club tiene para la ciudad. El Molinón respondió ayer al cariño que Marcelino Gutiérrez le profesó en su vida profesional al Sporting de la mejor manera posible, con un sentido y caluroso homenaje de una persona que es historia de la ciudad.