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JAVIER BARRIO
GIJÓN.
Viernes, 11 de marzo 2022, 01:43
Nadie puede decir que José Luis Martí, sin resultados de momento, está siendo un entrenador inmovilista, anclado en una idea. El entrenador balear se presentó ante el Zaragoza con un cambio de sistema, pasando al 4-3-3, y sonadas modificaciones en la idea ... de juego y en el once, entre ellas el cambio de los centrales, buscando piernas más livianas y jóvenes para adelantar líneas. No salió bien. Tampoco la disputa contra la Real B, a la que se enfrentó con el mismo dibujo, pero con la entrada de Nacho Méndez en el trivote como movimiento más llamativo, además de algún otro retoque esperado. En total, en esos 180 minutos, ha utilizado veinte jugadores.
Pero Martí no está convencido ni en el fondo ni en las formas de estos dos partidos, salvo momentos muy concretos, consciente de la urgencia del equipo. En las últimas sesiones, en ese sentido, ha desempolvado el 4-2-3-1 que caracterizó la etapa de David Gallego en el Sporting, pero con matices. La salida de balón de este era muy diferente y también la ofensiva exterior, con los laterales aprovechando los movimientos interiores de los extremos para cargar por la banda. Martí defiende la búsqueda de un juego más directo y una presión más alta, con los extremos haciendo más de extremos, pero, de momento, no ha cuajado. Al equipo le ha faltado mucho control y, además, ha ofrecido síntomas de incomodidad con tanto pelotazo aéreo, sin un delantero referencia de envergadura para embolsar. En Anoeta, Xabi Alonso buscó siempre empujar a Djuka lejos del área e impedir situaciones en las que tuviera terreno para explotar su punta de velocidad. Así, ante el Zaragoza, el Sporting terminó con un 52% y siete tiros a portería, pero la estadística cayó ante la Real B, frente a la que apenas disfrutó de un 42% de balón para producir tan solo dos disparos a puerta.
La variante está en estudio y también el nombre de los futbolistas que formarán el once. La semana está siendo bastante accidentada, en ese sentido, y ayer se cayeron de la dinámica del grupo Guille Rosas, de nuevo con problemas musculares, y Aitor y Gragera, afectados por sendos procesos víricos. También se retiró Rivera, pero, salvo sorpresa, estará disponible para el partido. Villalba, que podría regresar al enganche con ese sistema, completó la primera parte de la jornada con el grupo y sus sensaciones parecen buenas, como las de Jony. Marc Valiente, mientras, siguió con su tratamiento.
Martí confía en recuperar a la mayoría en estos dos últimos entrenamientos para preparar una jornada muy delicada. El Sporting saldrá a El Molinón el domingo (16 horas) conociendo el resultado del partido que enfrentará al Burgos con la Real Sociedad B un par de horas antes. Ya habrá jugado también el Mirandés con el Cartagena, que visita el sábado Anduva.
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