La peña El Cruce de Llanera, que preside Juan Luengos, capitaneó ayer un autocar hasta Burgos con más de sesenta aficionados y varios colectivos de la Federación de Peñas. DAMIÁN ARIENZA
Sporting de Gijón

La 'Mareona' ya calienta en Burgos

Dos mil aficionados arroparán hoy en El Plantío al Sporting de Albés, con debate en el ataque y la gran duda de Olaetxea

Javier Barrio

Gijón

Domingo, 10 de noviembre 2024, 01:00

Una buena representación de la caravana sportinguista madrugó ayer para ponerse en ruta y coger sitio en Burgos, tan teñido de rojiblanco que Luis Miguel Ramis hizo el viernes un guiño orgulloso a sus aficionados para que aprieten esta tarde de lo lindo. Cerca de dos mil sportinguistas, según las estimaciones, abrigarán a la tropa de Rubén Albés en un partido más espinoso de lo que expresa la estadística de los siete últimos partidos. Y con el que se completará el primer tercio de la competición en Segunda División. La tabla parcial muestra al Sporting como el mejor equipo de este tramo y al Burgos, con dos empates y cinco derrotas, como el peor.

Publicidad

La deriva ha forzado a Michu y compañía a cambiar el paso, liquidando la semana pasada a Bolo y fichando con carácter de urgencia a Luis Miguel Ramis. Un técnico metódico, curtido y respetado en la categoría, debutante precipitado con una derrota en el Tartiere (3-1) que afeó una buena primera mitad. Hoy se espera una versión más continuada y enérgica del Burgos, ya con una semana y media de curro de Ramis, lo que hace que Rubén Albés enarque las cejas y haya mandado un mensaje de alerta.

Al autocar del Sporting, que ya durmió ayer en Burgos, se subió finalmente Lander Olaetxea, duda por una sobrecarga. Su alistamiento confirmó su disponibilidad teórica. Pero, siendo un futbolista tan elemental para Albés y con un cometido tan esencial, falta por saber si los problemas físicos se han borrado del todo y podrá competir de inicio o si, por el contrario, el técnico le reservará en el punto de partida. Si está en condiciones, jugará. Si no, Nacho Martín recogerá su testigo como parte de una convocatoria sin novedades, continuista.

Campuzano, con opciones

La otra gran discusión en la selección de personal la genera Víctor Campuzano, el máximo goleador del equipo y un filón para la estadística, firmando un tanto cada 47 minutos. Albés le ha ido dosificando, siendo titular únicamente en Albacete, en la anterior salida, pero su eficacia está pidiendo a gritos continuidad. El técnico vigués, ponderando sus números, dejó abierta la puerta el viernes a su entrada en juego desde el inicio. Pero tampoco la confirmó, teniendo en cuenta que, con Dubasin como intocable, el técnico tendría que sentar a Otero o a Gaspar, dos futbolistas importantes en su esquema por su desgaste y verticalidad, el colombiano, y por su capacidad asociativa y llegada saliendo desde la banda zurda, el gijonés.

Al partido llega el Sporting en un momento notable, con números de ascenso directo antes del arranque de la jornada, pero con la necesidad de mejorar su cosecha en los desplazamientos. Intratable en El Molinón, con cinco victorias en los cinco últimos partidos, el equipo aspira a dar un salto de altura en los viajes. Tampoco tiene un bagaje de tirarse de los pelos –desde el 22 de septiembre solo ha perdido un partido–, pero su aventura forastera anda muy escasa de victorias. Sin contar el trago copero en Soria, el Sporting de esta temporada ha podido festejar únicamente, hasta el momento, en Eibar. Y ya hace algo más de un mes de aquel éxito.

Publicidad

Así, el equipo buscará descorchar esta tarde, a la hora del café, para poner el broche a un primer tercio de campeonato en el que ha ido de menos a más. El crecimiento constante de un proyecto de autor que ha ido incorporando solvencia y momentos de brillo, también otros de inestabilidad y encogimiento como en Albacete, al calor de la evolución de la competición, echando un capote, de paso, a temas más controvertidos del club como la gestión y la filosofía aplicada para la cantera. Aunque lo de hoy no será coser y cantar.

Mala dinámica en Burgos

Burgos se le atraganta al Sporting desde hace muchos años. Tanto que para encontrar la última victoria rojiblanca en El Plantío hay que rebobinar hasta hace casi 33 años. Un 29 de marzo de 1992 en el que Monchu firmaba la victoria ante un Burgos, Real Burgos, con colores y denominación diferente al actual. Otro equipo, que hoy por hoy se encuentra en proceso de liquidación. Ahí quedó el último rastro victorioso que hoy tratará de encontrar y conectar Albés.

Publicidad

Ramis, que el viernes pidió a sus futbolistas mandar «mensajes potentes desde ya» en el campo, reclutó a todo lo disponible para esta tarde. Las únicas salvedades serán el extremo Íñigo Córdoba y el defensa Navarro, que siguen en la enfermería. Pero, por lo demás, podrá empujar al campo y reunir en el césped un once competitivo, con buenos peloteros como Curro, que la pasada temporada fue uno de los grandes animadores de Segunda con sus 15 goles y que este año ya lleva tres, y el peligroso Sancris. También Fer Niño o el ovetense Borja Sánchez, prestado por el Oviedo y que jugará con el fuego emocional de medirse al eterno rival.

De entrada, se anuncia un oponente más correoso, vigoroso, motivado y más aplicado en el orden y la faena defensiva que el de las últimas jornadas, resuelto a dar un golpe sobre la mesa ante el Sporting. Será una prueba del algodón para el equipo de Albés, justo antes del eléctrico duelo del próximo fin de semana ante el Granada en El Molinón, que estará reforzado en la grada de El Plantío por una 'Mareona' de ilusión, esperanzada en que este puede ser el año. Un desplazamiento tan voluminoso como admirable por los tiempos que corren. El sportinguismo, a falta de entradas y con barreras de sobra, tira de ingenio, esfuerzo y contactos para colarse en los campos del fútbol español.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad