Marcaje al hombre por vacaciones

Gaspar, Guille Rosas, Cote, Rivera, Pedro, el propio Djuka cuando está en Gijón... Rafa Méndez (Gijón, 1988) se ha encargado de mantener viva la llama de más de media plantilla en estas vacaciones. Preparador físico de confianza de varios futbolistas del Sporting, la mayoría han pasado por sus manos este verano, como se han encargado ellos mismos de divulgar en sus redes sociales.

«Trabajo con ellos en los periodos transicionales, desde que termina la temporada hasta que empieza. Muchos jugadores buscan pulir pequeños detalles que, por la exigencia del calendario y de los entrenamientos de la temporada, no les da tiempo a hacerlo durante el año», concede sin ofrecer demasiadas pistas ni particularizar. «Les hacemos una valoración, con las necesidades que tiene cada uno, y después intentamos que no pierdan esos niveles de fuerza para la pretemporada y que lleguen a ella en un estado de forma óptimo, sin tener un bajón a la vuelta», amplía.

Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte por la Universidad de León, este preparador físico gijonés conoce con precisión las necesidades de los futbolistas del Sporting. No en vano, estuvo cuatro años en Mareo, trabajando en la base y en el filial y, también, en la readaptación en el gimnasio de los jugadores del primer equipo, dejando el club hace unos meses.

«Tengo que agradecer al Sporting la oportunidad que me dio y el haber podido trabajar allí con grandes profesionales. Pasé muchas horas con ellos en la readaptación y también fui viendo el crecimiento de los canteranos», apunta, defendiendo ahora un enfoque «holístico» en su nuevo cometido fuera de Mareo: «No solo es el campo, hay un trabajo psicológico, nutricional, de descanso, de los hábitos, de las relaciones sociales... Todo tiene impacto y, por eso, intentamos ir más allá con los jugadores».

En los futbolistas del Sporting con los que trabaja estas semanas, por otra parte, percibe buenas vibraciones de cara a la temporada. «Han tenido su parte de desconexión, pero cuando se ponen el mono de trabajo, son competidores natos. Están muy ilusionados, con un nuevo proyecto; las pretemporadas son muy ilusionantes», completa.

Uno de los que ha tenido a sus órdenes es Christian Rivera, a quien se le ha propuesto salir este verano, pero que parece empeñado en convencer a Miguel Ángel Ramírez de que tiene encaje en el proyecto. Muchas veces censurado por un carácter anárquico, el mediocentro ha dado cuenta de su trabajo en sus redes sociales, sin apenas tener vacaciones y a solo cuatro días del primer entrenamiento de la pretemporada. «Christian se ha puesto manos a la obra y ha trabajado duro; lo veo bien, con muchas ganas», anticipa Rafa Méndez, reservado con el trabajo de los jugadores. Aunque sí concede en relación al mediocentro que «dice mucho de Christian que, si no me equivoco, no se ha ido ni de vacaciones; ha estado con el mono de trabajo puesto conmigo y si no, en el gimnasio». Y concluye: «Está poniendo toda la carne en el asador para optimizar sus recursos».