ANDRÉS MAESE
GIJÓN.
Miércoles, 28 de septiembre 2022, 01:34
Aún vestido con la indumentaria de entrenamiento, Jony Rodríguez detuvo el tiempo para echar la vista atrás y rememorar el calvario vivido por las lesiones sufridas en los últimos meses que le han impedido disfrutar del fútbol. Su regreso es el más esperado por el ... sportinguismo y él lo sabe. La pasada temporada se despidió de la afición con un mensaje en el que reconocía quedar en deuda y prometía volver a vestir de rojiblanco. Cumplió con su palabra, pero su vuelta no ha sido como soñaba: «Nunca voy a poder devolver todo el cariño que recibo, pero sí espero poder devolver algo. Regresé, pero me tocó el revés de estar parado y ahora solo quiero volver a tener el nivel que tanto todo el mundo como yo queremos».
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Todos los futbolistas necesitan sentirse importantes en sus equipos, Jony lo es pese a que tan solo ha disputado unos minutos con la camiseta del Sporting. Un hecho que no calma el ansia del cangués por recuperar su mejor versión. «Estoy muy contento por estar de vuelta con el grupo y volver a sentirme futbolista porque cuando estás fuera parece que estás apartado de todo», explicó el atacante.
No han sido semanas sencillas para Jony, y así expuso su sufrimiento: «Nunca en mi carrera me caractericé por tener lesiones. Fueron dos años muy duros. Empezó todo en Osasuna donde encadené dos o tres lesiones importantes. Todo ello, sumado a los seis meses en los que estuve en Roma sin competir, fue el detonante».
El futbolista califica el trabajo con los readaptadores y los fisios como «lento y feo». Sin desmerecer a los profesionales que cuidan de ellos, Jony subrayó que un jugador siempre tiene la mente puesta en estar sobre el terreno de juego y no ve más allá. Además, su angustia lejos del balón se produjo porque «en esta última lesión no hay una explicación en sí. Cuidé todos los detalles e hice todo bien».
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Antes de dar carpetazo a las lesiones, Jony dedicó unas palabras tanto a Abelardo como a los miembros del cuerpo técnico, de los que dijo que «desde el primer momento me apoyaron y me ofrecieron tranquilidad para poder recuperarme lo mejor posible». También destacó su especial relación con 'El Pitu'. «Mi relación con el entrenador es muy buena desde hace mucho tiempo. Siempre me ha mimado en el aspecto psicológico para tener la mente despejada», dijo.
Lesiones al margen y con la mente puesta únicamente en el fútbol, a Jony le toca convencer a Abelardo de que está preparado para liderar la banda izquierda en la que ahora gobierna una de las sorpresas de la temporada como es Queipo. «Estoy muy contento por él. Siempre es muy importante que un jugador de la casa asome la cabeza y se asiente en el primer equipo», indicó Jony sobre el que es su competencia directa.
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El cangués reflexionó sobre la figura de Queipo porque seguramente le recuerde a él hace unos años. «Siempre es una buena noticia para todos; el club, el futbolista y la cantera, que los niños tengan un ejemplo a seguir». En su día Jony fue el ídolo de los canteranos y ahora está por ver si la carrera de Queipo le lleva a seguir los pasos del cangués.
Autocrítico con el juego
En la línea de gran parte de los futbolistas, Jony reconoció, respecto al fútbol expuesto por el Sporting en las primeras jornadas ligueras, que al equipo le falta cierta calma cuando tiene el balón en su poder. «El equipo empezó muy bien, aunque llevamos un par de partidos en los que no estamos bien con la pelota», admitió. Para él, la clave se encuentra en que «estuvimos más imprecisos de los normal por el ansia de querer ir hacia arriba», aunque después destacó que «en cuanto actitud, ganas y despliegue físico siempre estuvimos bien».
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Jony también repasó los enfrentamientos en El Molinón. «Quitando el partido del Racing, que no estuvimos mal, contra el Burgos jugamos bien, al Andorra se le gana y ante el Ibiza presionamos bien y estuvimos ordenados, pero con el balón no se estuvo fino», dijo. Todo esto para concluir con que «tenemos que mejorar cuando tenemos la posesión, lo sabemos y somos autocríticos. No podemos fallar pases sencillos».
Por último, el futbolista miró de reojo la clasificación. A estas alturas de la temporada y pese a los atragantamientos que ha tenido el equipo en ciertos partidos, el Sporting es sexto: «No me dice nada. El año pasado en noviembre el equipo iba líder y acabamos con el agua al cuello. Es anecdótico, aunque siempre que estés arriba es positivo».
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