El Girondins sube la puja por Pedro

La negociación sigue su curso, pero la cantidad que el Girondins pone sobre la mesa está aún lejos de colmar las aspiraciones del Sporting. Al club rojiblanco no le acaban de convencer los más de tres millones de euros que la entidad francesa está dispuesta a desembolsar y todo apunta a que esta segunda oferta también será rechazada, según las impresiones que trasladan fuentes del club.

La fórmula que se está siguiendo con la negociación por el posible traspaso de Pedro Díaz es similar a la que ya se utilizó con José Gragera en su venta al Espanyol. Las dos principales variables con las que se negocian son la cantidad de dinero a desembolsar y el porcentaje de los derechos federativos con los que se quedará el club francés.

Pero los casos de Gragera y Pedro son diferentes. Al primero le quedaba un año y medio de contrato y decidió no renovar, después de que las ofertas que le realizó el club no le convencieran. De hecho, en una entrevista con este periódico meses después de concretarse su salida, llegó a calificarlas de «irrisorias». Con estos condicionantes, su traspaso se cerró en 2,8 millones de euros más un 30% a futuro.

A Pedro, en cambio, le restan dos años de contrato, con lo que el tiempo juega a favor del Sporting. Fuentes conocedoras de la negociación explican que el club rojiblanco prima la cantidad de dinero que el Girondins esté dispuesta a desembolsar por encima de los futuribles ligados al porcentaje de los derechos del futbolista con los que se pueda quedar.

Las negociaciones siguen abiertas y no parece que se vaya a producir un acuerdo rápido. Aunque el mercado estará activo hasta el fin del mes de agosto, el Girondins tiene más urgencia que el Sporting en confeccionar su plantilla ya que la competición liguera en el país vecino comienza una semana antes.

La posible salida de Pedro Díaz del Sporting supondría un agujero importante en una plantilla en la que se ha convertido en un fijo y en la que tiene un importante peso deportivo. Miguel Ángel Ramírez fue claro el sábado cuando se refirió a este asunto. El entrenador del Sporting afirmó que en la dirección del club «saben con quiénes contamos y con quiénes no. A partir de ahí, el mercado se mueve y veremos lo que cumple las expectativas», pero dejó toda la responsabilidad sobre las operaciones en manos de los responsables del club, encargados de «analizar» las ofertas y decidir «si es bueno para los intereses deportivos y económicos».

Pero el posible traspaso de Pedro también tendría otras consecuencias en el primer proyecto deportivo liderado desde el inicio por Miguel Ángel Ramírez. Con el capítulo de salidas estancado, la llegada de refuerzos no acaba de concretarse, con solo una cara nueva dentro del vestuario, la del portero Rubén Yañéz. La inyección económica que supondría la marcha de Pedro aliviaría las cuentas de la entidad, dando además algo de margen para reforzar el equipo.