Gallego, con la duda de Bogdan, prepara ya el partido frente al Málaga

El equipo encara el fin de semana a todo un hueso como oponente, un equipo difícil de clasificar. Por un lado, el Málaga ha desinflado en la clasificación con respecto a la primera vuelta, establecido en la zona media de la tabla, manifestando ciertos problemas defensivos. Es junto al Cartagena (33) y al Castellón (32), el que más goles ha recibido de toda Segunda. Pero, por otro lado, el Málaga es uno de los proyectos más fiables cuando se desplaza en competición, con un extraño contraste entre los puntos que saca en La Rosaleda, apenas 11, y los que ha conseguido rebañar en sus viajes: 20. Esta atípica tendencia le sitúa como el tercer mejor visitante. Únicamente el Mallorca (28) y el Almería (22) tienen números superiores.

La explicación es que, pese a sus desequilibrios, el equipo de Sergio Pellicer ha ganado la mitad de los partidos que ha afrontado fuera de La Rosaleda. Seis, concretamente, sobre un total de doce. Esto tiene con la mosca detrás de la oreja a Gallego, que ha alertado a sus futbolistas de la importancia del choque. La historia reciente, además, desde la nueva denominación del Málaga Club de Fútbol, acentúa esa imagen de equipo peligroso. De los 23 enfrentamientos que refleja la estadística, el Málaga solo ha perdido en cuatro ocasiones. Eso sí, todas en El Molinón.

Por otra parte, el Sporting conoció ayer un nuevo horario dentro de la temporada. En este caso, con el añadido del accidentado final del partido, con un morbo especial. Los rojiblancos recibirán al Espanyol, en El Molinón, el próximo domingo 28 de febrero a las 16 horas. Con la baja de Víctor Campuzano confirmada para el choque por el acuerdo entre clubes y Djurdjevic al borde de la sanción, lo más probable es que el serbio vea la quinta amarilla este domingo.