Sporting-Espanyol | La fortaleza de El Molinón

Ayer fueron 7.000 los sportinguistas que acudieron a El Molinón para apoyar al Sporting en el que fue el último entrenamiento de la semana. Esta noche serán cerca de 30.000 almas que velarán por el bien de su equipo. Que también lucharán contra el Espanyol para intentar salir victoriosos del primer envite de la eliminatoria frente a uno de los favoritos del 'play off'.

Miguel Ángel Ramírez comentó el viernes que su rival «tiene una presión extra» por presupuesto y plantilla. Independientemente de la presión que puedan acumular los jugadores del Espanyol, esta noche van a ser recibidos de tal manera que sus piernas temblarán más de lo habitual.

El sportinguimo es consciente que hacer de El Molinón el fortín que fue durante la temporada regular es una de las claves para llegar a la deseada final de las eliminatorias que dan acceso a Primera División.

El equipo también lo sabe. La eliminatoria dura 180 minutos, pero un buen resultado en casa facilitará el desplazamiento a Barcelona para cerrar la semifinal que cuenta en sus filas, entre otros con Braithwaite, uno de los delanteros más peligrosos de la categoría.

«Ya supimos pararlo tanto en Barcelona como aquí en casa. En los dos últimos partidos no nos metió ningún gol y ojalá siga siendo así», destacó Diego Sánchez, que ayer habló con este periódico a poco más de 24 horas del choque ante los catalanes.

«Tenemos muy claro que es una final como las últimas cuatro que llevamos jugando. Y queremos devolverle a la afición el cariño que nos ha dado con una victoria en El Molinón», subrayó el central.

Si no hay novedad de última hora, el canterano volverá a formar en el muro rojiblanco junto a su compañero de fatigas de las últimas jornadas. Pablo Insua también será de la partida junto a Guille Rosas en el lateral derecho y Cote en el izquierdo.

«Una de las claves seguro que está en dejar la portería a cero. Es una máxima que hemos intentado durante toda la temporada. Y en estos momentos adquiere mucha más importancia», destacó el zaguero.

Pero no solo la parcela defensiva dependerá de Rubén Yáñez, uno de los jugadores más apoyados ayer en el último entrenamiento, y la línea de cuatro efectivos que jugarán por delante de él. El resto de los once elegidos por Miguel Ángel Ramírez tendrán que estar muy atentos a las ayudas porque enfrente no estará un rival cualquiera. Estará uno de los 'gallos' de la categoría.

El Sporting se ha ganado por méritos propios «luchar por algo bonito al final de la temporada». Son las palabras que llevan repitiendo Ramírez y sus jugadores durante todo el curso. Ha llegado el momento.

Todos quieren jugar este tipo de encuentros, pero hay varios efectivos que no lo podrán hacer por lesión. Es una de las pocas malas noticias que tuvo ayer el equipo en El Molinón.

Djuka y Queipo estaban entre algodones, al igual que Cali Izquierdoz y Nacho Méndez. Pero los dos atacantes no superaron la última prueba. Ya en el inicio de la sesión se les vio trabajar al margen del grupo. Una imagen que dio paso a su posterior descarte en la convocatoria de Ramírez, en la que tampoco está Gio Zarfino.

La gran novedad es la vuelta de Nacho Méndez después de que tuviera que ser sustituido nada más comenzar la penúltima jornada en Leganés. Su regreso no parece que se vaya a producir también en el once inicial. Resulta precipitado otorgarle los galones del centro del campo después de haber estado dos semanas fuera de la competición.

La idea de Ramírez pasa por aportar algo de experiencia en la alineación. Y dicha veteranía podría tener nombre y apellido: Roque Mesa.

En el caso de que el preparador se decida por el canario, parece que el sacrificado sería Nacho Martín. Ya que su idea de situar a Róber Pier por delante de la defensa resulta innegociable para Ramírez.

Si la delantera está definida tras la baja de Djuka. Las principales dudas están en los hombres que jugarán pegados a la línea de cal. Hassan no disputó ni un solo minuto en Elda en detrimento de Gaspar y Villalba.

Si el plan de partido de Ramírez pasa por tener el control del esférico, se decidirá por introducir a Villalba. En cambio si lo que quiere es buscar contragolpes letales, Hassan es el jugador ideal para ello.

Sea lo que sea. El Molinón tiene que rugir como nunca.

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