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A. MAESE
GIJÓN.
Viernes, 30 de septiembre 2022, 02:30
Quién no recuerda o no ha oído hablar de aquel Alemania-Austria del Mundial de 1982 en El Molinón que pasó a la historia por ser «un partido raro», como lo calificó ayer Abelardo Fernández. El técnico del Sporting aprovechó su intervención en sala ... de prensa para apoyar la iniciativa del Grupo Orlegui por hacer de Gijón una de las sedes del Mundial 2030 si finalmente sale adelante la candidatura de España y Portugal.
«El estadio más antiguo de España tiene que ser sede de un Mundial. Tuve la suerte de verlo en El Molinón y ojalá se pueda repetir, es algo que beneficiaría a todos los gijoneses y asturianos», afirmó Abelardo ante la inminente puesta en marcha del ambicioso proyecto para que la mayor competición mundial del fútbol se dispute, entre otros lugares, en Asturias.
Proyectos futuros a parte, el titular del banquillo del Sporting tan solo tiene la mente puesta en el duelo de esta noche en Tenerife. Un escenario poco amigable para la entidad gijonesa y un rival, entrenado por Ramis, que venderá cara su piel. «Es un conjunto que sale muy rápido y que le gusta jugar por las bandas, pero a su vez cuida muy bien sus espaldas, por lo que no nos lo pondrán nada fácil», dijo el gijonés.
Abelardo no podrá contar ni con Cote ni con Christian Rivera. El primero porque continúa recuperándose de sus problemas en el músculo sóleo y el segundo porque «aún no está preparado físicamente». «El martes terminó el entrenamiento muy cansado, pero es normal porque llevaba casi un mes fuera del trabajo del grupo», dijo el técnico.
Mientras Abelardo recupera efectivos y busca un estilo de juego definitivo, muchos son los que recuerdan su primera experiencia en el banquillo rojiblanco. Un pensamiento que el preparador quiere hacer olvidar porque «es una equivocación comparar a este equipo con el del ascenso». «Yo lo compararía con el del año pasado, que casi bajamos. Entiendo la ilusión que se ha creado por los nuevos dueños y los futbolistas, pero la realidad nos marca que intentaremos competir en cada partido».
El 'Pitu' continuó rebajando la euforia y recordó que «no quiero desprestigiar a la plantilla que tengo porque estoy encantado, pero somos un equipo en construcción». «Este año el objetivo del Sporting no es ascender, es competir. Si luego ascendemos, muy bien, pero la idea es la de ir partido a partido y después ya veremos», insistió ante los medios.
En cuanto al juego del equipo cuando mantiene el balón, el técnico no dudó en reconocer que «estamos siendo imprecisos, pero no creo que exista ansiedad». «Es cierto que, cuando fallas pases, pierdes ataques y haces que el equipo contrario te genere transiciones peligrosas. Tenemos que mejorar en esto», dijo.
La presencia del entrenador fue de casi media hora. Con sus futbolistas ya en el autocar para iniciar el viaje a Tenerife, Abelardo se refirió a varios nombres propios. El primero fue el de Jony, que también fue protagonista esta semana en Mareo: «Está en el proceso de recuperar su mejor versión, pero le falta para llegar a su nivel físico. Sabéis que le tengo un cariño especial, pero cuando esté bien se tendrá que ganar el puesto porque Queipo lo está haciendo muy bien».
También habló de Pol Valentin, que dejó una buena imprenta el pasado viernes. «Participó en varios partidos y siempre por delante de Guille. Es muy rápido, como lo demostró, y puede jugar en cualquier momento, aunque creo que Guille lo está haciendo bien».
El fondo de armario le vendrá bien el próximo mes, cuando se comprima el calendario.
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