Dotor: «Cuando llegó la oferta, sabía que habría mucho revuelo, era imposible decirle que no al Sporting»

«Tengo mucha hambre, ganas de una revancha conmigo mismo, de salir al campo, de demostrar, de apretar, de ayudar a mis compañeros. Tengo muchas ganas de ver El Molinón. Voy a dejarlo todo en el campo siempre, estoy deseando conseguir cosas bonitas». Algo encogido al principio, más relajado y suelto con el desarrollo de su intervención, vestido de rojiblanco casi de pies a cabeza, Carlos Dotor (Madrid, 2001) fue presentado esta tarde como nuevo jugador del Sporting, con el que llevará el dorsal '12'.

«Tengo muchas ganas de empezar esta nueva aventura, es un reto personal. Quiero demostrar el jugador que soy y tengo la confianza del club. Estoy deseando ponerme esta camiseta», reiteró en varias ocasiones, ansioso de que llegue el fin de semana y tratando con normalidad su traslado desde el Oviedo, donde jugó como cedido por el Celta la primera parte de la temporada, al Sporting, donde acabará la temporada.

«Cuando llegó la oferta del Sporting, sabía que iba a haber mucho revuelo. Tuve que mirar por mí porque era una oportunidad muy buena y en el Oviedo no tuve muchas oportunidades de entrar al campo», recordó el mediocentro, formado en la cantera del Madrid, quien, además, aseguró que «que te llegue una oferta del Sporting, era imposible decirle que no».

Elegante en las formas, el futbolista, que estuvo acompañado por su familia, completó con que «le agradezco al Oviedo la oportunidad que me dio, pero tengo que mirar por mí, ser egoísta y es un orgullo para mí estar aquí».

Antes había agradecido la confianza que percibió en las conversaciones con David Guerra, Gerardo García y Rubén Albés. Insistido sobre la repercusión de su llegada al Sporting, el futbolista relativizó las críticas recibidas desde Oviedo: «Lo he llevado bastante bien. Cuando me enteré de que el Sporting estaba interesado, sabía la que me iba a caer, pero no le doy mucha importancia. Creo que era lo mejor para mi carrera y lo que hable la gente, no me importa. Estoy aquí al cien por cien y con ganas de empezar».

Tampoco se mostró especialmente preocupado por el ruido que se ha generado con su traslado de Oviedo a Gijón en las redes sociales. «No lo he notado mucho porque 'Twitter' (ahora 'X') no tengo y es por donde la gente te suele meter cera. Me mandan amigos cosas en tono de risa y por lo visto a la gente le gusta meter caña y eso. Intento evadirme», señaló. Ya a modo de anécdota, declarándose alejado de las redes, explicó que «por Oviedo no he paseado aún y en el bar de debajo de casa, todo el mundo estaba encantado de que viniera aquí. Esa presión no la he notado en el día a día».

Con la misma naturalidad, también relativizó su celebración en el gol de Hassan en el derbi, que fue utilizada por el oviedismo para alimentar el pique con el sportinguismo en las redes sociales. «Somos profesionales y cuando estamos en un equipo, tienes que ayudarle. Si el equipo mete un gol, me alegro porque tengo buena relación con los compañeros y hay que sumar desde la posición en la que esté», expresó.

Rebobinando hasta el inicio de las gestiones para su llegada, Dotor recordó que «creo que todo empezó después de Navidad, cuando empezó el mercado y salió esta opción, que es buenísima para mí porque no estaba jugando casi nada». Y calificó al Sporting de «club histórico, grande, ni me lo pensé, desde el principio lo tuve claro».

Observando ya el partido del sábado, Dotor se alistó para el encuentro contra el Burgos. «Estoy al cien por cien», declaró, añadiendo que «en el tema ritmo me queda mucho, porque llevo tiempo sin competir, y en el tema fuerza hice las pruebas el otro día y las sensaciones de los dos últimos meses son muy buenas».

En relación a la propuesta de Rubén Albés, Dotor consideró que encaja en su perfil futbolístico como un guante, incluso vio cierto parentesco con la forma de jugar que tenía el Castilla de Raúl González, uno de los entrenadores que más han influido en su carrera: «La verdad que el estilo que tiene el míster me viene muy bien, me recuerda mucho a cuando jugábamos en el Castilla, con Raúl, es un poco parecida y me siento cómodo».

Después habló y se explayó con su «buena relación» con Gelabert, con el que compartió vestuario en las categorías inferiores del Madrid y también «residencia». «Le escribí a él y a Kevin Vázquez y me dijeron que había muy buen grupo. Ha sido bonito reencontrarme con compañeros», completó.

De vuelta al esquema de Albés, reiteró que «he visto que tiene un juego que me puede venir bien», agradeciendo «la confianza que ha tenido para acercarse a mí y explicarme el estilo». «Puedo encajar mejor que en el Oviedo y siento que tengo la confianza del míster y del entrenador, y espero devolvérsela en el campo», atajó, considerándose como «un jugador con mucha llegada y creo que al míster le gustan ese tipo de futbolistas y el juego que tienen». «Igual me ha faltado esa libertad para llegar al área contraria y desplegar ese 'box to box'. Aquí me dan esa libertad», defendió.

Testigo de la derrota del Sporting en Granada, donde disputó unos minutos al final, Dotor no escondió que «igual el equipo está pasando por una mala racha, pero nuestro pensamiento tiene que ser el de mirar arriba y, por lo poco que he visto, creo que tenemos buenos jugadores». Con ese punto de partida se vio convencido de que «hay que ir a ganar a todos los equipos, que esto es muy largo y se le puede dar la vuelta sin ningún problema».

De hecho, no vio el 'play off', del que el Sporting está ahora mismo a nueve puntos, como un imposible: «Creo que sí se puede alcanzar. Esta liga es muy larga y todo el mundo va a tener rachas malas, y aquí ganas dos o tres partidos y ya vas a volver a estar peleando por el 'play off'. Hay que dar la vuelta a esto». «Veo al equipo un poco frustrado con la situación, pero también con esas ganas y hambre», apostilló, sosteniendo que «nuestro pensamiento tiene que ser el de mirar para arriba».

De su futuro, con una posible continuidad en el Sporting, aunque no está contemplada en el contrato, no quiso hablar. «Cuando llegue el verano, que tengo que volver a Vigo, ya se hablarán las cosas», sentenció. Sí concedió que «me gustaría estar en un sitio un tiempo largo porque cuando das muchas vueltas estás desubicado».

Con respecto a su posible debut en El Molinón, no vio la hora. «El recuerdo que tengo fue el del derbi, que fue un ambientazo con resultado muy positivo. Espero que haya un ambiente igual o parecido», solicitó, declarándose «con muchas ganas, tengo toda una semana para ganarme un sitio en los entrenamientos».

Antes, el futbolista madrileño completó su primer entrenamiento con el Sporting, con Rubén Albés sumergido ya en la preparación del partido del sábado contra el Burgos (El Molinón, 16.15 horas). «Ha sido mi primer entrenamiento y me faltan cosas por coger, tengo ganas de demostrar que sigo siendo el mismo futbolista», dijo.

David Guerra, por su parte, explicó que Dotor es «un jugador al que veníamos siguiendo desde hacía tiempo y que nos va a aportar mucho», destacando «su llegada, con gol».

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