El Sporting se queda a medias en su regreso a la competición

El partido comenzó con un Sporting firme, valiente y decidido. Organizó una presión alta, lo que le ayudó a aprovecharse de los errores del Deportivo para generar peligro en la portería gallega.

No tardó en dejarse notar Murilo. El mejor jugador del partido. Su juego duró lo que tardó en vaciarse su depósito de gasolina. Hay entonces, creó peligro con buenas internadas por la derecha y gozó de la mejor ocasión del choque tras una gran acción de Álvaro Vázquez y Carmona.

El extremo se plantó delante de Dani Giménez y decidió rematar con un suave toque con el interior de su pie derecho. El palo fue el único que evitó el tanto rojiblanco. Tras el error, el choque se igualó y el Deportivo generó cierta inquietud en la defensa del Sporting. Babin despejó todas las dudas con una notable actuación.

A el buen hacer de Murilo se fueron sumando Carmona y Manu García. Mientras Álvaro Vázquez generaba espacio, el tridente disfrutaba encarando el área rival. También en la primera parte pudo marcar el Sporting mediante Carmona. El mallorquín recibió un pase de Murilo, pero el meta rival despejó el peligro a saque de esquina.

Fernando Vázquez no lo tenía claro y decidió realizar tres cambios nada más comenzar la segunda parte. Aliviaron a su equipo, que pudo adelantarse en el marcador en una acción de Bóveda, pero poco más.

El paso de los minutos terminó por adormilar a unos y a otros. Los tres meses sin competición se dejaron notar en una segunda parte en la que se bajó el ritmo y como consecuencia desaparecieron las ocasiones.

Manu García pudo marcar tras una asistencia de Murilo, pero su disparo lo volvió a despejar Dani Giménez. Con su derechazo se terminaron las ocasiones para un Sporting que dio por bueno el empate. No quiso perder lo que había logrado en 85 minutos para no regresar de vacío a Gijón.