J. BARRIO
GIJÓN.
Lunes, 6 de diciembre 2021, 01:29
La derrota del Sporting dejó muy tocado a David Gallego, al borde de la destitución, algo que se estudiará en estas próximas horas, sin que ayer nadie pudiera confirmar su continuidad al frente del proyecto, con el partido ante el Huesca fijado para el viernes ( ... El Molinón, 21 horas). Tampoco su salida. El grueso del consejo de administración vio la derrota del equipo desde la distancia, con un análisis de urgencia de lo sucedido y de la preocupante dinámica del equipo tras el encuentro.
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En el Estadio de Gran Canaria estuvieron el consejero Fernando Losada y Joaquín, quienes regresarán a Gijón junto a la expedición esta tarde. También vio el choque en directo el director deportivo, Javi Rico, otro de los rostros de la crisis junto al entrenador, al que se pulsará su opinión para encontrar una solución, con el equipo a solo cuatro puntos del descenso y un partido muy delicado en cinco días.
El club ha recibido el ofrecimiento de algún técnico en las últimas semanas y el propio director deportivo ha sondeado el mercado en busca de un potencial relevo si Gallego no encauza la situación. Pero, al menos hasta ayer antes del partido, la esperanza pasaba por obtener una serie de buenos resultados y poder terminar con el técnico 2021. Eso sí, el más mínimo tropiezo, como sucedió, también tenía capacidad en ese pensamiento para desembocar en la destitución.
Hasta el momento, a la espera de ver qué sucede este lunes, la confianza en Gallego se ha mantenido por tres cuestiones, pese a lo negativo de los resultados. Por un lado, la cuestión económica juega un papel importante, especialmente cuando el club tiene la intención de reforzarse con un delantero en el próximo mercado de enero. Por otro, aunque con Gallego nunca ha habido una sintonía especial, el consejo ha tratado por todos los medios de evitar destituir, otra vez, a un entrenador de forma prematura. En la tercera está el pensamiento que traslada el gran protagonista, que se ve fuerte.
Hay una última variable y es que la experiencia del Sporting con estos cambios no ha sido positiva. Y eso pesa en el argumento de la continuidad otra jornada. El escenario es muy delicado. Ayer nada garantizaba la continuidad de Gallego que, de seguir, tendrá un partido complicado el viernes. Y en El Molinón, que ya le despidió con pitos en la Copa ante el Ceares. La situación, además, es muy comprometida en la tabla, con el equipo distanciado ya por siete puntos del sexto.
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