Sporting | La cuesta de enero de Djukic

Tiene mucho tajo el serbio, al que se vio en directo más discrepante con su compañía de lo que luego expresó en rueda de prensa. Su primera experiencia resultó discreta, anclado al 4-2-3-1 y dando carrete a un once casi calcado al que utilizó José Alberto en su adiós. Salvo matices y dentro de las limitaciones que tenía de personal, se echó de menos alguna solución de nuevo cuño, con el proyecto en punto y seguido. El Sporting siguió enchironado por una capacidad goleadora raquítica y que ya le sitúa como el quinto proyecto que menos goles ha celebrado este año (20). Eso en el global. Como forastero es el primero (5). Ahí, el martes encendió una luz, viéndose un pequeño paso del equipo con Djukic dentro de la valoración de un pésimo partido.

Pasó un mal trago el Sporting en esa plástica salida de balón que pretende el serbio, que ha adelantado la línea defensiva y el recorrido de los laterales. Pero, regateada esa presión de los dos delanteros del Zaragoza, el equipo generó más situaciones ofensivas claras a domicilio que nunca este año. Fueron 13 remates, con 4 a portería, y 2 disparos al larguero. El equipo también había alcanzado esa cifra total en Lugo y Miranda, pero sin enfocar con tanto peligro.

En ese estirón participó Hernán Santana, rescatado para la competición por Djukic en el minuto 64 de partido y que podría tener un papel más importante con el entrenador serbio. Descartado por José Alberto, el relevo en el banquillo tiene capacidad para alterar su situación en el club, que no le ha abierto la puerta de salida en este mercado invernal de momento, contra lo que pudiera parecer hace unos días. En Zaragoza completó una interesante media hora final. Eso sí, con los de casa parapetados en su campo por la ventaja.

Miedoso y desajustado

Salvo esos dos detalles, el Sporting se comportó como un equipo miedoso, desajustado y totalmente vulnerable en defensa, sufriendo al espacio y en cada acometida del Zaragoza, en la que se mascaba la tragedia. La falta de punta en ataque se coronó con esa desastrosa actuación en defensa. En el primer tanto erró Mariño, atornillado, y Djurdjevic, perdiendo la marca de Guti. En el segundo desafinó toda la línea defensiva, que ahora mismo parece un flan. Djukic, en ese sentido, confía en recuperar en los próximos días a Marc Valiente, un futbolista importante para su idea, y Borja López. A corto plazo, el problema lo tendrá en los laterales con la lesión de Damián y la sanción de Molinero.

No contribuye tampoco a mejorar el rendimiento del colectivo el preocupante momento que atraviesan jugadores como Carmona o la debilidad que manifiestan otros como Carlos Cordero. El cuerpo técnico espera por refuerzos en el mercado, sobre todo para fortalecer su juego exterior. Tampoco ayudó en Zaragoza esa falta de tino que tuvieron Aitor, Djurdjevic y, sobre todo, Manu García, quien marró una ocasión clarísima, aunque previamente había repartido dos asistencias de lujo al balear y al serbio. El próximo martes, con más días y más posibilidades de elegir, el Sporting debe ser otra cosa.