La afición del Sporting mete su gol

No es el momento de las lamentaciones. Tampoco el de las críticas. Solo es el tiempo de apoyar al Sporting para que sea capaz de resolver el lío en el que se ha metido y consiga certificar la permanencia cuanto antes. De ganar el domingo a las cuatro de la tarde al Girona, daría un paso enorme para lograrla. De hecho, podría hacerlo de forma matemática en la siguiente jornada, pero una derrota, podría incluso hacer caer a la entidad rojiblanca a las posiciones de descalabro por primera vez en toda la campaña. En este contexto, el club apela a El Molinón con precios populares y la afición, como siempre, ha respondido. Poco antes de las once de la mañana, momento en el que se abrían las taquillas del estadio, una treintena de personas aguardaban pacientes a la espera de retirar sus localidades. Después hubo un goteo constante que se mantuvo hasta última hora del día. Lo mismo sucedió en la tienda oficial del club que es el otro punto de venta. A tenor del ritmo al que se han despachado las localidades, el Molinón no colgará el cartel de no hay billetes, pero superará ligeramente los 20.000 espectadores.

El más madrugador de toda la afición fue José Luis Armijo. Vio al Sporting competir en Europa o pelearle una liga al Madrid. De aquella, estuvo alentando al equipo. Y ahora que la situación es muy diferente, «me dejaré la voz más que nunca». Armijo está convencido de que el Sporting seguirá en el fútbol profesional y fue a comprar la entrada para su nieta «porque el estadio será una caldera y no quiero que se lo pierda».

Igual de optimista se muestra Eva García que espera ver a «El Molinón de las grandes ocasiones» para generar un ambiente propicio con el que obtener la victoria. Consciente de que para cuando arranque el partido ya habrán jugado el filial de la Real Sociedad y el Amorebieta, espera que haya algo más de suerte que el pasado sábado. «Esa victoria del conjunto vasco en Fuenlabrada no nos permite más errores», comenta. Superada la crítica situación, «será el momento de exigir responsabilidades».

Gabino Vigil sacaba tres entradas para su hermano, cuñado y un ahijado. Desde su punto de vista, esta promoción es todo un acierto, «porque habrá un ambiente de primera para intimidar al Girona». A estas alturas del año, todos los seguidores usan la calculadora, mientras en las operaciones caben todas las cábalas. Vigil piensa que con ganar en Fuenlabrada y empatar otro partido podría servir. Sin embargo, le gustaría llegar a la última jornada con los deberes hechos y para eso es fundamental ganar al Girona. «El primer gol lo tenemos que meter nosotros», afirma.

Y pese a la delicada situación del club, la afición también se aferra a la figura de Abelardo para lograr la salvación. Para Aida Esteban López que fue a sacar una entrada para su madre, «el equipo mostró síntomas de mejoría en Huesca». Pablo Tasis, también hizo cola por encargo de su madre quien le especificó que «solo vendrá el domingo por Abelardo». El propio Tasis coincide en que es quien más se lo merece «porque ni la gestión ni la plantilla es muy estimulante».

Poco antes del inicio del encuentro, a las tres y cuarto, hay convocada una protesta contra la propiedad frente a las taquillas de El Molinón bajo el lema 'Porque Sporting somos nosotros'. Aunque el ambiente está un tanto caldeado, lo cierto es que hay muchas personas que cuestionan la idoneidad de la protesta en una situación como la actual. «La gestión económica es buena y la deportiva se puede mejorar, pero realmente no debemos debatir los cambios estructurales cuando nos jugamos la vida», afirma Luara Rodríguez.

En esta línea, Omar Sánchez, también contrario a las protestas, confía en que al menos estas se produzcan fuera del estadio «y no interfieran en el desarrollo del partido con cánticos que no sumen».