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El Sporting recibió en los últimos días un planteamiento del Oviedo para los sportinguistas que quieran acudir al derbi, que se jugará el próximo 11 de enero en el Carlos Tartiere (21 horas), y que está siendo estudiado por su particularidad. El club azul ofrece un total de 1.150 entradas, pero con dos precios distintos, aunque todas las entradas sean en la misma ubicación, la grada visitante. Algo menos de la mitad de estas localidades tendrán un coste de 25 euros cada entrada (un total de 570). Pero el resto, unas 580, se disparan hasta los 60 euros.
El planteamiento ha sorprendido en el club gijonés, argumentado en que son los precios que el Oviedo ha determinado para la vuelta del clásico asturiano. Hace días, la entidad azul anticipó al Sporting el envío de esa cantidad de entradas, 1.150, solicitando una respuesta. Entonces, no se especificaban las condiciones, que sí fueron expuestas en un contacto posterior.
Cabe recordar que en el partido de ida, el Sporting puso a disposición del Oviedo todas las entradas de las que disponía con la nueva limitación de la grada visitante, un total de 570, al precio de 25 euros. Estas fueron rechazadas por el club azul y la APARO en señal de protesta.
El Sporting está manteniendo contactos con distintos colectivos del sportinguismo para pulsar todas las opiniones y responder lo antes posible a la propuesta del Oviedo, con lo que queda en el aire en este momento saber si los gijoneses aceptarán todo el paquete, solo las 570 entradas de 25 euros o, por el contrario, ninguna.
El partido, para el que el Sporting recuperará a Dubasin y puede que a Juan Otero, dará el banderazo de salida a la segunda vuelta. El equipo de Albés, en ese sentido, llega en su peor momento, con solo una victoria en los siete últimos partidos de liga, sin contar la eliminación de la Copa del Rey, pero con la sensación de que el equipo ha merecido más y está siendo muy penalizado.
Los jugadores y el cuerpo técnico, que lidera Rubén Albés, quedaron ayer de vacaciones, a la conclusión del partido, y la previsión, si no hay cambios de última hora, es que el primer entrenamiento se lleve a cabo el lunes 30 de diciembre, pendiente de que sea oficializado.
Por otra parte, los miembros de seguridad de El Molinón tuvieron que reubicar a un aficionado del Málaga, que se encontraba en la Tribuna Oeste, durante el partido. El momento generó algo de desconcierto.
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