Algunas drogas inoloras, incoloras e insípidas se utilizan para perpetrar agresiones sexuales. Es el caso de la escopolamina, la llamada 'burundanga'. Por ello, algunos establecimientos de Cataluña han implementado las primeras medidas.
Publicidad
Hasta 25 discotecas han apostado por introducir novedades en el formato en el que ofrecen las bebidas a sus clientes, logrando con ello que los posibles agresores encuentren dificultades a la hora de drogar a sus víctimas potenciales con escopolamina. Para ello, han apostado por comenzar a utilizar vasos con tapa, lo que permite que el consumidor controle mejor aquello que entra en su bebida, reduciendo la posibilidad de ser drogado.
Según el jefe de los Mossos d'Esquadra en Girona, Josep Milan, este tipo de agresiones sexuales se ha convertido en un «grave problema» en Cataluña, lo que ha obligado a la comunidad a implementar nuevas medidas. El principal objetivo ahora, como sentenció el secretario general de FECASARM, Joaquim Boadas en TV3, es evitar las agresiones sexuales mediante sumisión química. En la actualidad, las autoridades catalanas recogen varias denuncias de este tipo cada semana, en las que una de cada tres víctimas habría estado bajo la influencia de este tipo de sustancias.
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.