Desentierran a un hombre nueve días después tras escuchar unos gritos

El centro médico no encontró señales vitales, los que llevaron a cabo la operación siguen manteniendo su versión de los hechos. La familia del fallecido tuvo que enfrentarse a las dos 'muertes' de este hombre. Su esposa, María Gladys Marín, incluso tuvo que ser ingresada por una crisis nerciosa, porque desde el momento de su muerte pensó que Fidel volvería. «Voy a esperar a que llegue, porque él va a llegar», cuenta uno de los hijos al medio El Tiempo que decía la madre entre llanto.

Habían transcurrido nueve días cuando los vecinos escucharon los gritos. Fue entonces cuando decidieron desenterrarle y llevar el cadáver al centro de salud, donde volvieron a certificar su muerte. Sin embargo, para corroborar el diagnóstico fatal y esperado, y ante la insistencia de los vecinos -quienes aseguran que el cuerpo no se había descompuesto-, le derivaron al hospital de San Andrés, donde loe médicos dictaron la misma sentencia: Fidel estaba fallecido.

Aún con todo y tras el revuelo originado, las autoridades han decidido realizar una necropsia, que analizará no solo el cuerpo inerte, sino el lugar de los hechos y las posibles pistas que respondan al argumento de los vecinos, quienes siguen asegurando que le escucharon gritar.