Fachada del Bar 'Armandín', cuyo propietario vendió la pistola con la que fue asesinada Isabel Carrasco.

Armando, un polémico hostelero al que dos policías salvaron la vida

El hombre que vendióla pistola con la que mataron a Isabel Carrasco, ya fallecido,fue detenido en 2012 acusado de violación

Olaya Suárez

Viernes, 24 de abril 2015, 11:50

Un nombre, Armando. Y una acusación, la venta de una pistola. El levantamiento del secreto del sumario del crimen de Isabel Carrasco ha servido para conocer la identidad del hostelero que, supuestamente, vendió el arma empleada por María Montserrat González para acabar con la vida de la política leonesa. Según los datos aportados a la Policía por la autora confesa, se trata de Armando García Oliva, cuyo cadáver fue localizado en avanzado estado de descomposición a principios de 2013 en el interior del bar que regentaba en la calle de María Zambrano, en La Calzada, y que llevaba su nombre, Armandín.

Publicidad

Fue precisamente a raíz de que EL COMERCIO revelase la aparición de los restos del hombre cuando Montserrat supo que había fallecido, tal y como dijo a los investigadores. La adquisición del arma un revolver HK USP Compact, calibre 9 milímetros se habría producido, según su testimonio, dos años antes. Fue en esa época cuando Armando se vio envuelto en otro turbio episodio, en el que dos agentes de la Policía Local de Gijón le salvaron la vida después de que intentase tragar una bolsa con cocaína, en un intento de ocultar la droga con la que supuestamente traficaba.

Ocurrió el 27 de mayo de 2012, cuando en la centralita del 092 entró la llamada de petición de auxilio de una mujer, que aseguraba que la habían sedado con morfina y que una pareja la había sometido a abusos sexuales durante toda la noche dentro del bar Armandín. Cuando los agentes llegaron al local, ubicado en la Algodonera y a escasos metros de la iglesia de Fátima, se encontraron a la supuesta víctima fuera y en el interior al dueño del negocio, de 50 años, y a una ciudadana de origen rumano de 25 años.

Sexo y drogas

En el cacheo que se les realizó localizaron 500 euros en efectivo, varios teléfonos móviles y diez papelinas de lo que parecía ser cocaína, además de un blíster con comprimidos de sulfato de morfina. Durante la detención, el hostelero trató de tragar una bolsa de un tamaño similar al de una pelota de tenis de mesa, que supuestamente contenía cocaína y con la que estuvo a punto de asfixiarse, de no ser por la rápida intervención de los policías locales, quienes le practicaron la denominada maniobra de Heimlich comprensión abdominal para que expulsase la bolsa, que le obturaba las vías respiratorias.

Se da la circunstancia de que esa forma de proceder de los agentes con el ahora relacionado con el crimen de Isabel Carrasco les hizo merecedores de una condecoración por parte de los mandos de la Jefatura de la Policía Local, durante la festividad deSan Miguel de ese mismo año. No se sabía por entonces, de ser cierta la confesión de Montserrat González, que le había facilitado el arma con el que ejecutaría el crimen.

Publicidad

Meses después de aquel incidente, cuando aún no se había celebrado el juicio, los vecinos de la calle de María Zambrano alertaron a la familia de Armando García Oliva por el olor a putrefacción que desprendía el local, que desde hacía meses se encontraba con las persianas cerradas a cal y canto. La hermana del fallecido esperó a que pasasen las Navidades para entrar al bar. Cuando por fin se decidió, encontraron el cadáver en avanzado estado de descomposición. Nadie lo había echado en falta.

Quedan aún muchos flecos por atar.Entre ellos, cómo llegaron madre e hija con piso en la zona centro y esposa e hija de un inspector jefe de la Policía, ahora de nuevo en la comisaría de Gijón a contactar con ese individuo, con numerosos antecedentes. Los vecinos de La Algodonera no salen de su asombro por que el difunto Armando, de quien suponían que traficaba con chocolate, esté ahora relacionado con el crimen de la presidenta del PP de León.

Publicidad

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad