A. M.
Oviedo.
Martes, 5 de noviembre 2024, 01:00
Doce personas y seis furgonetas cargadas hasta los topes con siete toneladas de alimentos, ropa, bombas de achique y demás herramientas salieron en la noche del domingo de San Esteban de Pravia en dirección a la localidad valenciana de Albal, afectada por la devastadora DANA, para tratar de poner su granito de arena y ayudar a la población a combatir la catástrofe sufrida y dotarles en la medida de lo posible de productos de primera necesidad.
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Ante las desoladoras imágenes y duros testimonios por lo ocurrido en tierras valencianas, un grupo de vecinos de San Esteban de Pravia organizó una campaña de recogida de material que fue respaldada por comercios locales, llevando a recolectar a través de cientos de donaciones anónimas varias toneladas de artículos de primera necesidad y de limpieza con el objetivo de ofrecer auxilio a los afectados del pueblo valenciano de Albal, donde uno de los organizadores de esta expedición tiene amigos, ya que es valenciano de nacimiento.
Tras la recolecta de todo tipo de víveres, el grupo de voluntarios partió el pasado domingo a las 22 horas de la noche de San Esteban de Pravia. Por delante, 800 kilómetros que separan esta localidad asturiana con Valencia, a donde llegaron ayer por la mañana con muchas ganas de ayudar y las manos llenas, también de cariño y solidaridad.
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