LAURA PIRE
Lunes, 21 de noviembre 2022, 15:12
Si en algún momento te recetaron un complemento de vitamina D porque en tu análisis de sangre salía por debajo de lo necesario, intenta recordar cuál era la pauta. Normalmente se suele recomendar un complemento de vitamina D una vez al mes o cada 15 días, según el déficit que uno tenga. Las instrucciones también incluyen suspender o bajar la frecuencia de la toma durante el verano por el aumento de horas de luz y sol que recibimos que recibimos sobre nuestra piel, que ayudan a la activación de vitamina D en formas químicas distintas que incluimos en la alimentación. Luego llega el invierno, baja la luz, se cambia la hora y nos encontramos que en la analítica que nos hacen en el trabajo, por ejemplo, o en enero volvemos a tener baja la vitamina D porque hemos abandonado la pauta.
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Este mensaje está dirigido exclusivamente a recordaros por favor, que las recomendaciones sobre complementos nutricionales debemos actualizarlas e indagar de nuevo en la posibilidad de seguir necesitando ese extra de nutriente. Merece la pena. Defensas, huesos, musculatura, piel, etc. Todo son ventajas. Y por supuesto, ajusta bien la dosis. Más no es mejor.
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