Fruta cortada por mitades: ¿Es segura?

Es habitual que ciertas frutas, debido a su tamaño, se vendan por mitades en supermercados y fruterías. Es el caso del melón, la sandía o la piña. Sin embargo, esta presentación entraña algunos riesgos que no han pasado desapercibidos para la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (AESAN), que ha elaborado un preciso informe en el que habla de lo que puede suponer este formato:

- Una de las principales cuestiones en las que el informe pone el foco es que, al estar cortada, el tiempo de vida útil de la fruta es menor, lo que conlleva un riesgo mayor de que el consumidor pueda contraer Salmonella, Escherichia coli verotoxigénico o Listeria monocytogenes.

- La AESAN también señala la acidez y maduración de las frutas, pues cuanto mayores sean estas más crece el riesgo de deterioro y contaminación. De las 4 frutas (sandía, melón, piña y papaya) analizadas en el estudio de AESAN, como recoge la OCU, es la piña la que más expuesta está por su nivel de acidez.

- En lo que se refiere a la conservación, se advierte de que la fruta puede conservarse a temperatura ambiente hasta tres horas sin que implique un riesgo significativo. Para ello, no se deben superar los 25º, el lugar debe estar ventilado y no expuesto a la luz solar y se debe refrigerar, tras la compra, a no más de 5ºC.

En cuanto a los comercios, se recomiendan que, quienes corten la fruta, extremen la higiene de utensilios y superficies de corte; que se controlen las condiciones de exposición y almacenamiento; así como que se descarten, para este tipo de presentación, tanto las frutas excesivamente maduras como aquellas que tengan heridas en la superficie.

• Temas
• Dietética