Brittany Mainard: «El cáncer me habría quitado mucho más»

«El 2 de noviembre es el día que he elegido para morir. Espero que mi familia esté orgullolla de mí y de mi decisión». ¿Qué harías si el médico te diese seis meses de vida? Esta pregunta que muchos se han hecho, tal vez después de ver películas como 'Mi vida sin mí' de Isabel Coixet, «morir no es tan fácil como parece». Imagino que lo que todo el mundo querría es no sufrir, morir sin dolor, pero si supieses exactamente el día que te vas a morir ¿qué harías?

Brittany Mainard falleció el sábado a los 29 años tras tachar de su lista su último deseo, visitar el Gran Cañón con su familia. El pasado mes de abril un médico la informaba de que tenía seis meses de vida, un cáncer agresivo de cerebro en fase IV la iba a matar. Mainard sufría fuertes dolores de cabeza y de cuello, y síntomas similares a apoplejía por lo que decidió que no iba a esperar a que la enfermedad la consumiera iba a decidir cuando morir y cómo. La joven americana puso fecha al día de su muerte quería hacerlo rodeada de su familia y antes de que su vida dejase ser digna.

La decisión de Brittany de acabar con su vida se convirtió en fenómeno viral cuando hizo publico su deseo, y muchos criticaron su decisión, para algunos, no hay que rendirse ante el cáncer pero para ella la decisión estaba tomada y no estaba dispuesta a pasar sus últimos días en la tierra sufriendo. «Creo que a veces la gente me mira y piensa 'bueno, no pareces tan enferma como dices estar' pero cuando estoy teniendo un ataque y no puedo hablar, después, me siento profundamente enferma».

Aunque la decisión no es fácil ella creía verdaderamente en que «la libertad está en la elección». No es una obligación, «el que considere que la muerte con dignidad no es la vía, puede optar por no hacer uso de ella». Brittany grabó un vídeo con su familia en el que explica las razones que la llevaron a tomar esta decisión y como todos ellos decidieron apoya su voluntad, pese a ser lo más duro. En el vídeo ella misma explica como los dolores se estaban apoderando de ella y su deseo de no dejar de vivir antes de morir.

Mainard se despidió del mundo a través de las redes sociales, consciente de la relevancia de la decisión de su muerte había tenido, aprovechándose de eso quiso dejar un mensaje al mundo: «Adiós a todos mis queridos amigos y a la familia que amo. Hoy es el día que he elegido para morir con dignidad ante mi enfermedad terminal, este cáncer cerebral terrible que me ha quitado tanto, pero que me habría quitado mucho más», escribió Maynard. «El mundo -agregó- es un lugar maravilloso, viajar ha sido mi gran maestro, mis amigos íntimos y demás son los más generosos. Incluso tengo un grupo apoyándome mientras escribo. Gente haced una pausa para apreciar la vida. Si cambiamos nuestros pensamientos, ¡cambiamos nuestro mundo! Amor y paz a todos ustedes. Adiós, mundo. Difundid buena energía. ¡Transmitidla!».

Brittany tuvo que trasladarse de Oakland (California) al vecino estado de Oregón, que sí permite el suicidio asistido. Su familia y ella se mudaron para cumplir su última voluntad y también su muerte dejó la polémica sobre la eutanasia en el aire. Brittany falleció a los 29 años junto a su recién estrenado marido con el que apenas llevaba casada un año y tomó la decisión de quitarse la vida; porque como ella explica, «ni siquiera soy capaz de reconocerme a mi misma cuando salta la enfermedad». Tal vez la muerte de Brittany sirva para reabrir el debate del derecho a decir cómo morir, algo que sin duda la haría feliz.