La infanta Sofía y la Princesa Leonor participan en la lectura virtual de 'El Quijote'

La voz de la Infanta Leonor pudo escucharse, alta y clara y con un tono parecido al de su hermana mayor, después de que la Princesa le cediese el testigo, pues fue ella quien leyó primero, ambas sentadas juntas en un sofá de tonos claros. Había sido el Cervantes Joan Margarit quien diese inicio a la lectura con el famoso 'En un lugar de La Mancha...', y a ellas les tocó seguir leyendo dos fragmentos del primer capítulo de la obra cumbre cervantina.

Y si doña Leonor debutó leyendo un artículo de la Constitución antes de ofrecer el pasado mes de octubre su primer discurso en Oviedo, en el marco de los Premios Princesa de Asturias, a doña Sofía le tocó lidiar con la magna obra literaria. Estuvo sonriente y tranquila mientras observaba leer a doña Leonor, de quien cogió el libro una vez la primera había terminado su intervención. «Es, pues, de saber, que este sobredicho hidalgo, los ratos que estaba ocioso (que eran los más del año) se daba a leer libros de caballerías con tanta afición y gusto, que olvidó casi de todo punto el ejercicio de la caza, y aun la administración de su hacienda», leyó con voz firme la infanta. Lucía una camisa azul y un pantalón negro, mientras que su hermana iba de rosa y pantalón blanco, ambas con el pelo suelto. Entre ellas, como suele suceder siempre que aparecen en público y quedó patente en su última visita a Asturias, con motivo de la entrega de los Premios Princesa y el Pueblo Ejemplar de Asturias en la localidad cabraliega de Asiegu, se aprecia una gran complicidad. Puede decirse que la infanta Sofía superó la prueba con nota, y así se lo hacía ver su hermana con su gesto de aprobación.