Más de 2 millones de casos y más de 135.000 muertes en todo el mundo

La OMS considera este evento un homenaje a todos los embajadores y trabajadores sanitarios del mundo. Con él, buscan recaudar más fondos de filántropos, el sector privado y los gobiernos para el Solidarity Response Fund (Fondo de Respuesta Solidario) en su investigación de la COVID-19 y el apoyo a todos los países del mundo.

Hasta el momento, este fondo ya cuenta con más de 150 millones de dólares aportados por más de 245.000 personas, corporaciones y fundaciones. Este fondo se usará para comprar equipos de protección individual (EPI), pruebas de diagnósticas y otros suministros médicos imprescindibles.

Informan, además, de más de 2 millones de casos y más de 135.000 muertes en todo el mundo. «La OMS está actualizando sus guías para incluir los cuidados durante el periodo de recuperación y tras el alta hospitalaria», informaron.

La OMS está al corriente de los deseos de diversos países en Europa y en Norteamérica de relajar las medidas de distanciamiento social. Sin embargo, se remiten a toda la información aportada en ruedas de prensa anteriores e incitan a todos los gobiernos a tomar todas las precauciones posibles para no caer en un ciclo de distanciamiento-levantamiento del distanciamiento. Para estas situaciones, ya han publicado una guía que está disponible desde el 16 de abril de 2020.

Para luchar contra el estigma surgido de los mercados de animales, como el de Wuhan, en el que se sospecha que se produjo el primer contagio de coronavirus de un animal a un ser humano, la OMS muestra su apoyo a este tipo de negocios. «Estos mercados son una importante medio de vida para millones de personas en todo el mundo. Pero, en muchos lugares, no se han regulado ni mantenido como deberían», aclaran. La posición oficial de la OMS respecto a estos negocios es que solo se les debería permitir reabrir bajo garantías de salubridad y estándares de higiene.

Para asegurar estas medidas, la OMS está trabajando con la Organización Mundial para la Salud Animal (OIE, por sus siglas en inglés) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) para desarrollar guías aplicables a estos mercados. El motivo es que se estima que el 70% de los nuevos virus que surgen en la actualidad provienen de animales, por lo que el trabajo conjunto de estas tres organizaciones es imprescindible.

A pesar de las aparentes aplanaciones de la curva en muchos países desarrollados, la OMS muestra desde hace semanas su preocupación por la llegada del virus al continente africano. Informan de un aumento del número de casos conocidos del 51% durante la semana pasada y de un aumento del 60% de las muertes conocidas por esta enfermedad en varios países de África. Sin embargo, reconocen que, «con la dificultad que están teniendo para obtener pruebas diagnósticas, estas cifras son probablemente mayores».

Por su parte, la OMS está trabajando con varios socios para que las pruebas diagnósticas, que ya se encuentran en África, sean accesibles para todos los profesionales de la salud. Además, el mismo doctor Tedros se encuentra en constante contacto con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) en África, así como con los mandatarios de los principales países afectados.

Además, el doctor Tedros también está en contacto con la Primera Ministra de Barbados, Mia Amor Mottley, quien actúa también como portavoz de los países del Caribe, para informarse del estado de las islas. «No dejaremos a ningún país atrás», reiteraron una vez más.

En Europa, la OMS ya trabaja con los gobiernos de diversos países como Finlandia con el apoyo de la Comisión Europea para frenar el impacto de la pandemia en las vidas y en los medios de vida de toda la población. «Cada país está en un momento distinto de la pandemia», recordó el doctor Mike Ryan, «y cada caso hay que tratarlo de forma individual».

Siguiendo su política de transparencia y educación, la OMS se ha comprometido a que la información llegue a los profesionales de la comunicación de todos los países. En la actualidad, su chatbot está interactuando con 2,6 millones de personas para proporcionarles información legítima y fiable en más de 16 países y luchar así contra lo que describen como una «infodemia».

Además, desde el próximo lunes, la OMS proporcionará interpretación para sus ruedas de prensa en los países oficiales de las Naciones Unidas: árabe, chino, francés, ruso y español. Con esta medida buscan una mayor implicación de la prensa internacional en sus ruedas de prensa.

Desde que saliesen a la luz las discrepancias en las cifras de afectados y fallecidos por coronavirus en Wuhan, la OMS ha llevado a cabo una investigación y achaca las diferencias en cifras a varios factores, según la doctora van Kerkhove. El primero, es el desbordamiento del sistema sanitario de Wuhan y la muerte de algunos pacientes en sus casas, que dificultaron los informes oficiales. También citan el retraso en el papeleo por parte de los profesionales sanitarios, que dedicaban todos sus esfuerzos a tratar a los pacientes y no en rellenar la documentación oficial, así como la construcción de otros centros y hospitales de campaña para casos leves, donde el informe de las cifras no se hizo de forma cronológica y, en algunas situaciones, informes incompletos.

La OMS ha revisado desde entonces estos datos y publicó una actualización, de ahí la discrepancia en las cifras. Como consecuencia, han desarrollado unas guías internacionales para certificar el diagnóstico de COVID-19 y evitar futuros errores.

Uno de los temas más controvertidos de las últimas semanas ha sido el posible desarrollo de una vacuna. La OMS está en contacto con Emmuel Macron, presidente de Francia y con Bill Gates, fundador de Microsoft y filántropo, para asegurar la distribución equitativa de la posible vacuna una vez se desarrolle.

Mientras tanto, animan a la población a seguir las medidas instituidas hasta el momento y afirman que «este virus se puede contener».